/ martes 4 de mayo de 2021

Con Valor Agregado | Campañas vacías

El pasado viernes 30 de abril comenzó la campaña en el Estado de México de candidatos a las 125 Presidencias Municipales, 40 Diputaciones Locales por el principio de mayoría y 30 Diputaciones Locales por representación proporcional, sin dejar de lado las Sindicaturas y Regidurías que están en disputa.

Tendría que ser un periodo de propuestas a soluciones de problemas que aqueja a la sociedad, sin embargo y de forma desafortunada, muchos están enfrascados en la descalificación hacia sus contendientes, unos contra los que gobiernan y buscan continuidad y otros contra quienes los antecedieron en el poder.

Más allá de ello, existe un desconocimiento de atribuciones, sobre todos en el caso de los aspirantes de Diputados Locales, es decir, para saber que puede ser atractivo para el electorado, desde el ámbito de sus posibles atribuciones, si es que el voto les favorece, debieran hacer postulados viables, medibles, alcanzables y evaluables, sin embargo, como es momento de prometer, cualquier postulado que les parezca ser atractivo para el electorado a quien se dirigen, se convierte en propuesta, sin saber que no lo podrán cumplir porque simplemente no estaría dentro de sus facultades.

Resulta muy lamentable que los candidatos estén haciendo “campañas” recorriendo calles, avenidas, áreas recreativas como parques y jardines, así como domicilios particulares, cuando son ellos quienes debieran tener un diagnóstico previo a la campaña y llegar con alternativas de solución, es verdad que la población gusta de ser escuchada, pero más le beneficia que sean resueltos los problemas comunes de injerencia gubernamental, cada uno en sus atribuciones.

Desafortunadamente, las campañas son casi el único tiempo y espacio en que los políticos se observan en público como personas de la misma comunidad, intentando ser uno más de los mismos de ciudadanos que no conocen.

De igual forma, pareciera que la pandemia está erradicada, se realizan reuniones masivas, tratando de mostrar el músculo con el mayor número de adeptos, sin importar si son del municipio o distrito al que aspiran o si son electores, lo importante es que el evento sea visiblemente dominante, con saludo de mano, abrazos, sin sana distancia y sin productos sanitizantes.

Otro punto que está quedando a deber y es la gran oportunidad para ejecutarlo, son las campañas virtuales, reuniones masivas no presenciales, que en un futuro próximo nos lleven a votaciones electrónicas, disminuyendo costos, riesgos y en este momento tan particular, contagios masivos que pudieran ser más catastróficos que las primeras oleadas de Covid-19.

El pasado viernes 30 de abril comenzó la campaña en el Estado de México de candidatos a las 125 Presidencias Municipales, 40 Diputaciones Locales por el principio de mayoría y 30 Diputaciones Locales por representación proporcional, sin dejar de lado las Sindicaturas y Regidurías que están en disputa.

Tendría que ser un periodo de propuestas a soluciones de problemas que aqueja a la sociedad, sin embargo y de forma desafortunada, muchos están enfrascados en la descalificación hacia sus contendientes, unos contra los que gobiernan y buscan continuidad y otros contra quienes los antecedieron en el poder.

Más allá de ello, existe un desconocimiento de atribuciones, sobre todos en el caso de los aspirantes de Diputados Locales, es decir, para saber que puede ser atractivo para el electorado, desde el ámbito de sus posibles atribuciones, si es que el voto les favorece, debieran hacer postulados viables, medibles, alcanzables y evaluables, sin embargo, como es momento de prometer, cualquier postulado que les parezca ser atractivo para el electorado a quien se dirigen, se convierte en propuesta, sin saber que no lo podrán cumplir porque simplemente no estaría dentro de sus facultades.

Resulta muy lamentable que los candidatos estén haciendo “campañas” recorriendo calles, avenidas, áreas recreativas como parques y jardines, así como domicilios particulares, cuando son ellos quienes debieran tener un diagnóstico previo a la campaña y llegar con alternativas de solución, es verdad que la población gusta de ser escuchada, pero más le beneficia que sean resueltos los problemas comunes de injerencia gubernamental, cada uno en sus atribuciones.

Desafortunadamente, las campañas son casi el único tiempo y espacio en que los políticos se observan en público como personas de la misma comunidad, intentando ser uno más de los mismos de ciudadanos que no conocen.

De igual forma, pareciera que la pandemia está erradicada, se realizan reuniones masivas, tratando de mostrar el músculo con el mayor número de adeptos, sin importar si son del municipio o distrito al que aspiran o si son electores, lo importante es que el evento sea visiblemente dominante, con saludo de mano, abrazos, sin sana distancia y sin productos sanitizantes.

Otro punto que está quedando a deber y es la gran oportunidad para ejecutarlo, son las campañas virtuales, reuniones masivas no presenciales, que en un futuro próximo nos lleven a votaciones electrónicas, disminuyendo costos, riesgos y en este momento tan particular, contagios masivos que pudieran ser más catastróficos que las primeras oleadas de Covid-19.