/ sábado 14 de septiembre de 2019

Con valor agregado / Momento de escuchar


Suceden muchas cosas simultáneas en la vida política y económica de México. Un cambio súbito en el gobierno a todos sus niveles, incertidumbre en materia económica inicialmente provocada por la inercia mundial y una población en plena madurez por lo que respecta a la participación ciudadana donde la influencia de la nueva forma de comunicar pone un escenario por demás interesante para el presente del país.

Ejemplificar con lo que sucede en el ámbito económico resulta muy ilustrativo si partimos de dimensionar que el mayor generador de empleos del país es el sector empresarial 98% concentrado en micros, pequeñas y medianas empresas, que dan empleo a más de 50 millones de personas en el país.

Por eso es que los sectores laboral y empresarial organizados toman una importancia mayúscula cuando hablamos de cualquier tema del ámbito público. Sencillo, la estabilidad se pone en juego.

Temas de dominio público han cobrado toda la importancia en los asuntos económicos tan importantes para detonar inversión pues somos parte de una economía global, donde el desarrollo y el bienestar tienen un impacto directo en la calidad de vida de los ciudadanos.

Los gobiernos en todos sus niveles están aprendiendo a escuchar y a traducir necesidades, los ciudadanos hemos aprendido a informarnos, a participar, a opinar y a buscar formas de manifestarnos.

Un ejemplo reciente son las iniciativas y propuestas para incrementar los ingresos de la nación donde necesariamente se tienen que buscar vías de recaudación para atender todas las necesidades de los sectores poblacionales. En respuesta, el sector productivo ha manifestado que las medidas no son lo más justas en cuanto al alcance de contribuyentes y medidas punitivas.

Conforme avanza el tiempo, el gobierno ha tenido que ser más creativo para encontrar formas de escuchar al ciudadano y atender sus peticiones. Hoy vemos variadas formas de atención ciudadana desde cara a cara para escuchar y atender necesidades. Otros que realizan consultas abiertas o mediante foros. Unos que involucran en mayor grado al ciudadano con consejos consultivos por ejemplo.

La manera de informar también se ha vuelto indispensable, hoy los ciudadanos esperamos no solo percibir acciones en nuestro entorno, sino poder tener al alcance información que relate y transparente resultados del trabajo del servidor público. También es muy valioso contrastar, evaluar y determinar si hemos elegido de manera correcta a quienes nos gobiernan.

Por eso la responsabilidad social ha cobrado un alcance mayor, nos sentimos parte del problema y la solución, hemos dado un paso en un grado de apertura tal que la indiferencia comienza a quedarse de lado, al menos somos receptivos a la información de lo que diario sucede y emitimos opiniones sobre lo que está bien y lo que no de acuerdo a como lo queremos ver, ese es un gran paso hacia la madurez como nación.

PRESIDENTA DEL CCEM / @ LauraGlezEDOMEX


Suceden muchas cosas simultáneas en la vida política y económica de México. Un cambio súbito en el gobierno a todos sus niveles, incertidumbre en materia económica inicialmente provocada por la inercia mundial y una población en plena madurez por lo que respecta a la participación ciudadana donde la influencia de la nueva forma de comunicar pone un escenario por demás interesante para el presente del país.

Ejemplificar con lo que sucede en el ámbito económico resulta muy ilustrativo si partimos de dimensionar que el mayor generador de empleos del país es el sector empresarial 98% concentrado en micros, pequeñas y medianas empresas, que dan empleo a más de 50 millones de personas en el país.

Por eso es que los sectores laboral y empresarial organizados toman una importancia mayúscula cuando hablamos de cualquier tema del ámbito público. Sencillo, la estabilidad se pone en juego.

Temas de dominio público han cobrado toda la importancia en los asuntos económicos tan importantes para detonar inversión pues somos parte de una economía global, donde el desarrollo y el bienestar tienen un impacto directo en la calidad de vida de los ciudadanos.

Los gobiernos en todos sus niveles están aprendiendo a escuchar y a traducir necesidades, los ciudadanos hemos aprendido a informarnos, a participar, a opinar y a buscar formas de manifestarnos.

Un ejemplo reciente son las iniciativas y propuestas para incrementar los ingresos de la nación donde necesariamente se tienen que buscar vías de recaudación para atender todas las necesidades de los sectores poblacionales. En respuesta, el sector productivo ha manifestado que las medidas no son lo más justas en cuanto al alcance de contribuyentes y medidas punitivas.

Conforme avanza el tiempo, el gobierno ha tenido que ser más creativo para encontrar formas de escuchar al ciudadano y atender sus peticiones. Hoy vemos variadas formas de atención ciudadana desde cara a cara para escuchar y atender necesidades. Otros que realizan consultas abiertas o mediante foros. Unos que involucran en mayor grado al ciudadano con consejos consultivos por ejemplo.

La manera de informar también se ha vuelto indispensable, hoy los ciudadanos esperamos no solo percibir acciones en nuestro entorno, sino poder tener al alcance información que relate y transparente resultados del trabajo del servidor público. También es muy valioso contrastar, evaluar y determinar si hemos elegido de manera correcta a quienes nos gobiernan.

Por eso la responsabilidad social ha cobrado un alcance mayor, nos sentimos parte del problema y la solución, hemos dado un paso en un grado de apertura tal que la indiferencia comienza a quedarse de lado, al menos somos receptivos a la información de lo que diario sucede y emitimos opiniones sobre lo que está bien y lo que no de acuerdo a como lo queremos ver, ese es un gran paso hacia la madurez como nación.

PRESIDENTA DEL CCEM / @ LauraGlezEDOMEX