/ viernes 30 de octubre de 2020

Con Valor Agregado | Números cuesta arriba

La crisis económica está encima, pareciera que la pandemia no nos deja avanzar, al menos no de la forma en que queremos o necesitamos, es un lastre que no tiene fin.

Algunas firmas especialistas de bancos estiman que este 2020 culminemos con un decrecimiento del PIB inferior al 10%, los más mesurados lo llevan al -7.5%, pero las cifras oficiales que salen a lo largo del tiempo nos dan un panorama mucho más desalentador.

El INEGI, dio a conocer los resultados del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE), para el periodo abril – junio de 2020, recordemos que fueron los meses más difíciles y de cierre de la gran mayoría de la actividad económica, lo cual ubicó al Estado de México con un decrecimiento de -17.1% respecto al mismo periodo del año inmediato anterior y también a la baja con -16.6% si se toma como referencia el trimestre de enero – marzo de este año.

Por donde se vea la afectación es catastrófica, es verdad que no se esperaban números con crecimiento, pero son caídas de más de dos dígitos y revelan la crisis en la que estamos insertos.

El Estado de México siempre ha sido un referente a nivel nacional, precursor en políticas públicas y atención a la ciudadanía, ya que al ser la entidad más poblada debe tomar decisiones sensatas y adecuadas, pero en el caso del tema económico está dejando mucho que desear, cuenta con el mayor número de unidades económicas en el país, la más amplia mano de obra y aun así, Campeche, Colima, Chiapas, CDMX, Durango, Jalisco, Michoacán, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Veracruz, que también tuvieron caídas en su indicador trimestral, pero por debajo de la tierra mexiquense.

Al mismo nivel de decrecimiento se encuentra Chihuahua, que por cierto ya regresó a semáforo sanitario rojo, esperemos no correr con la misma suerte en ese vínculo inquebrantable entre economía y contingencia sanitaria. Caso aparte es el de Tabasco, único estado que pese al confinamiento logró un crecimiento de 1.5% respecto al primer trimestre de 2019, sin duda, caso para el análisis.

No resta más que esperar los resultados del tercer trimestre de 2020, los cuales serán publicados a finales de enero de 2020, sin embargo, aún falta el bimestre de mayor dinamismo de la economía, esperemos que los distintos gobiernos sean lo suficientemente facilitadores para que esta época se aproveche, se consoliden las ventas y generen los empleos que tanto se requieren.

Sin duda el impacto económico de 2020 tomará varios años en revertirse.

La crisis económica está encima, pareciera que la pandemia no nos deja avanzar, al menos no de la forma en que queremos o necesitamos, es un lastre que no tiene fin.

Algunas firmas especialistas de bancos estiman que este 2020 culminemos con un decrecimiento del PIB inferior al 10%, los más mesurados lo llevan al -7.5%, pero las cifras oficiales que salen a lo largo del tiempo nos dan un panorama mucho más desalentador.

El INEGI, dio a conocer los resultados del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE), para el periodo abril – junio de 2020, recordemos que fueron los meses más difíciles y de cierre de la gran mayoría de la actividad económica, lo cual ubicó al Estado de México con un decrecimiento de -17.1% respecto al mismo periodo del año inmediato anterior y también a la baja con -16.6% si se toma como referencia el trimestre de enero – marzo de este año.

Por donde se vea la afectación es catastrófica, es verdad que no se esperaban números con crecimiento, pero son caídas de más de dos dígitos y revelan la crisis en la que estamos insertos.

El Estado de México siempre ha sido un referente a nivel nacional, precursor en políticas públicas y atención a la ciudadanía, ya que al ser la entidad más poblada debe tomar decisiones sensatas y adecuadas, pero en el caso del tema económico está dejando mucho que desear, cuenta con el mayor número de unidades económicas en el país, la más amplia mano de obra y aun así, Campeche, Colima, Chiapas, CDMX, Durango, Jalisco, Michoacán, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Veracruz, que también tuvieron caídas en su indicador trimestral, pero por debajo de la tierra mexiquense.

Al mismo nivel de decrecimiento se encuentra Chihuahua, que por cierto ya regresó a semáforo sanitario rojo, esperemos no correr con la misma suerte en ese vínculo inquebrantable entre economía y contingencia sanitaria. Caso aparte es el de Tabasco, único estado que pese al confinamiento logró un crecimiento de 1.5% respecto al primer trimestre de 2019, sin duda, caso para el análisis.

No resta más que esperar los resultados del tercer trimestre de 2020, los cuales serán publicados a finales de enero de 2020, sin embargo, aún falta el bimestre de mayor dinamismo de la economía, esperemos que los distintos gobiernos sean lo suficientemente facilitadores para que esta época se aproveche, se consoliden las ventas y generen los empleos que tanto se requieren.

Sin duda el impacto económico de 2020 tomará varios años en revertirse.