/ lunes 19 de abril de 2021

Contexto | Democracia saludable

El momento de la ciudadanía para elegir a sus representantes en los diversos espacios de representación ha llegado; las campañas electorales, las elecciones, los spots, los discursos y los mensajes políticos han llegado para formar parte de nuestra vida por unos días.

Sin embargo, este espacio de ejercicio democrático del que todas las mexicanas y los mexicanos debemos formar parte, se presenta en un nuevo entorno y con un escenario muy distinto; la salud es ahora el eje rector de todas las acciones que como ciudadanos llevamos a la práctica. Y el ejercicio democrático no puede ser la excepción.

Desde el sector económico somos promotores de ciudadanos informados, participativos, críticos y con una profunda participación en la vida política y democrática del país; pero como se mencionó anteriormente, la salud colectiva es la prioridad en una pandemia que en nuestro país ha dejado más de 212 mil víctimas mortales en México.

Si bien, estamos a poco más de 2 meses de la jornada electoral, desde ahora debemos tomar medidas y prevenciones con la finalidad de proteger la salud de los ciudadanos que con sentido democrático desean ser partícipes de la construcción de la vida democrática en el país.

Los partidos, sin importar su ideología, tendencia, color o historia; deben ser disruptivos en una etapa inédita de la vida nacional, no podemos mantener las campañas con los esquemas que hemos venido manejando en el que lo importante era congregar a la mayor cantidad de personas alrededor de un candidato, la estrategia debe ser otra.

De seguir con las tendencias del pasado, corremos el riesgo de tener un resultado catastrófico en materia de salud, recordando que la pandemia del Covid-19 a nivel mundial no ha respetado a presidentes de naciones o representantes locales.

Como ciudadanos además de comprometernos a analizar las propuestas de cada uno de los candidatos, debemos de calificar la importancia que los candidatos dan a la salud de sus futuros electores en las grandes concentraciones.

Además de una autocrítica por parte de los partidos políticos y sus candidatos, el sector económico mexiquense propone la oportuna intervención de las autoridades federales, estatales y municipales, a fin de limitar y delimitar las actividades a realizarse en este periodo de campañas.

El gobierno, debe ser claro en las acciones que pueden realizar candidatos y partidos para que estos promuevan una sana participación de la sociedad en una jornada electoral que deseamos sea pacífica, activa e histórica; en nuestras manos está nuestra salud y el futuro de nuestra democracia.

El momento de la ciudadanía para elegir a sus representantes en los diversos espacios de representación ha llegado; las campañas electorales, las elecciones, los spots, los discursos y los mensajes políticos han llegado para formar parte de nuestra vida por unos días.

Sin embargo, este espacio de ejercicio democrático del que todas las mexicanas y los mexicanos debemos formar parte, se presenta en un nuevo entorno y con un escenario muy distinto; la salud es ahora el eje rector de todas las acciones que como ciudadanos llevamos a la práctica. Y el ejercicio democrático no puede ser la excepción.

Desde el sector económico somos promotores de ciudadanos informados, participativos, críticos y con una profunda participación en la vida política y democrática del país; pero como se mencionó anteriormente, la salud colectiva es la prioridad en una pandemia que en nuestro país ha dejado más de 212 mil víctimas mortales en México.

Si bien, estamos a poco más de 2 meses de la jornada electoral, desde ahora debemos tomar medidas y prevenciones con la finalidad de proteger la salud de los ciudadanos que con sentido democrático desean ser partícipes de la construcción de la vida democrática en el país.

Los partidos, sin importar su ideología, tendencia, color o historia; deben ser disruptivos en una etapa inédita de la vida nacional, no podemos mantener las campañas con los esquemas que hemos venido manejando en el que lo importante era congregar a la mayor cantidad de personas alrededor de un candidato, la estrategia debe ser otra.

De seguir con las tendencias del pasado, corremos el riesgo de tener un resultado catastrófico en materia de salud, recordando que la pandemia del Covid-19 a nivel mundial no ha respetado a presidentes de naciones o representantes locales.

Como ciudadanos además de comprometernos a analizar las propuestas de cada uno de los candidatos, debemos de calificar la importancia que los candidatos dan a la salud de sus futuros electores en las grandes concentraciones.

Además de una autocrítica por parte de los partidos políticos y sus candidatos, el sector económico mexiquense propone la oportuna intervención de las autoridades federales, estatales y municipales, a fin de limitar y delimitar las actividades a realizarse en este periodo de campañas.

El gobierno, debe ser claro en las acciones que pueden realizar candidatos y partidos para que estos promuevan una sana participación de la sociedad en una jornada electoral que deseamos sea pacífica, activa e histórica; en nuestras manos está nuestra salud y el futuro de nuestra democracia.

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