/ viernes 1 de noviembre de 2019

De Análisis y Reflexión | Atentado contra los municipios

El órgano máximo de un municipio es el ayuntamiento, un órgano colegiado, deliberativo y plural; colegiado: porque son varios sus integrantes, deliberativo: porque al momento de tomar decisiones, en el cabildo lo hablan, lo discuten y lo aprueban; y plural: porque en su integración participan las diversas corrientes políticas que compitieron en el proceso electoral; los de mayoría de la planilla ganadora y los siguientes son de los partidos políticos que no ganaron la elección pero tuvieron una votación necesaria para poder tener un síndico y/o varios regidores de representación proporcional.

El ayuntamiento tiene un jefe que preside las sesiones de cabildo, modera el debate y es el representante de toda la población, éste se denomina presidente municipal, que es el líder, el jefe político del municipio y además el representante jurídico del municipio que gobierna; pues bien, la semana pasada, el martes 22 los presidentes municipales del país pertenecientes a los partidos políticos de oposición al Gobierno federal; es decir, del PAN; PRI; PRD; y MC; fueron agredidos cuando pretendían acercarse para sostener un diálogo directo con el presidente de la República; pues bien el “peje” ordenó que dispersaran y usaran la represión a los presidentes municipales con gas lacrimógeno, lo que dañó la integridad física de estos jefes políticos municipales.

Desde las 6:00 am de ese martes, aproximadamente 300 presidentes municipales del PAN, PRI, PRD y MC realizaron la protesta afuera de Palacio Nacional (exactamente a la hora que el “peje” inicia con sus reuniones de seguridad y su conferencia mañanera), con el objeto de exigir recursos para el presupuesto 2020 en materia de infraestructura y seguridad pública, sin embargo a las 7:00 am fueron agredidos por personal de la policía militar, con gas lacrimógeno; la excusa que envía la presidencia de la República inmediatamente a través del vocero Jesús Ramírez Cuevas fue en el sentido de que: “Un numeroso grupo de alcaldes trataban de ingresar a Palacio Nacional de manera violenta para llegar al salón tesorería por lo que se roció el ambiente de gas lacrimógeno con el objeto de dispersarlos y evitar un accidente por las obras que se realizan en el inmueble”.

Nuevamente el presidente miente, pues ha expresado en reiteradas ocasiones que no iba a utilizar la violencia para disolver las manifestaciones. Sin embargo observamos cómo el presidente no hace uso de la fuerza pública en contra de los maestros de la CNTE, cuando bloquean las vías del tren y las vialidades de la Ciudad de México, causando con ello pérdidas por miles de millones de pesos.

El presidente no usa la fuerza pública, ni la acción legal contra normalistas de Tenería que secuestran a 92 choferes y se apoderan de autobuses, por el contrario les regala plazas automáticas y les garantiza impunidad por sus delitos.

El “peje” no usa la fuerza legítima del Estado contra los cárteles de la droga que son organizaciones criminales más poderosas que el Ejército mexicano, por el contrario les envía abrazos y los deja ir.

Por lo tanto es preocupante que se reprima a los presidentes municipales, que lo único que querían era solicitar audiencia; son autoridades electas por el pueblo en su correspondiente jurisdicción, electas igual que el “peje”, no cometían ningún delito, entonces no se justifica el arrojarles gas a la cara, ni aunque haya sido poquito como dijo el “peje” al día siguiente, donde afirmó: “Se dispersó una dosis moderada de aerosol defensivo, natural en el ambiente, que no puso en riesgo la vida de ninguna persona”; ¿pues qué quería este presidente?

EX MAGISTRADO EN RETIRO / famlopezs@hotmail.com

El órgano máximo de un municipio es el ayuntamiento, un órgano colegiado, deliberativo y plural; colegiado: porque son varios sus integrantes, deliberativo: porque al momento de tomar decisiones, en el cabildo lo hablan, lo discuten y lo aprueban; y plural: porque en su integración participan las diversas corrientes políticas que compitieron en el proceso electoral; los de mayoría de la planilla ganadora y los siguientes son de los partidos políticos que no ganaron la elección pero tuvieron una votación necesaria para poder tener un síndico y/o varios regidores de representación proporcional.

El ayuntamiento tiene un jefe que preside las sesiones de cabildo, modera el debate y es el representante de toda la población, éste se denomina presidente municipal, que es el líder, el jefe político del municipio y además el representante jurídico del municipio que gobierna; pues bien, la semana pasada, el martes 22 los presidentes municipales del país pertenecientes a los partidos políticos de oposición al Gobierno federal; es decir, del PAN; PRI; PRD; y MC; fueron agredidos cuando pretendían acercarse para sostener un diálogo directo con el presidente de la República; pues bien el “peje” ordenó que dispersaran y usaran la represión a los presidentes municipales con gas lacrimógeno, lo que dañó la integridad física de estos jefes políticos municipales.

Desde las 6:00 am de ese martes, aproximadamente 300 presidentes municipales del PAN, PRI, PRD y MC realizaron la protesta afuera de Palacio Nacional (exactamente a la hora que el “peje” inicia con sus reuniones de seguridad y su conferencia mañanera), con el objeto de exigir recursos para el presupuesto 2020 en materia de infraestructura y seguridad pública, sin embargo a las 7:00 am fueron agredidos por personal de la policía militar, con gas lacrimógeno; la excusa que envía la presidencia de la República inmediatamente a través del vocero Jesús Ramírez Cuevas fue en el sentido de que: “Un numeroso grupo de alcaldes trataban de ingresar a Palacio Nacional de manera violenta para llegar al salón tesorería por lo que se roció el ambiente de gas lacrimógeno con el objeto de dispersarlos y evitar un accidente por las obras que se realizan en el inmueble”.

Nuevamente el presidente miente, pues ha expresado en reiteradas ocasiones que no iba a utilizar la violencia para disolver las manifestaciones. Sin embargo observamos cómo el presidente no hace uso de la fuerza pública en contra de los maestros de la CNTE, cuando bloquean las vías del tren y las vialidades de la Ciudad de México, causando con ello pérdidas por miles de millones de pesos.

El presidente no usa la fuerza pública, ni la acción legal contra normalistas de Tenería que secuestran a 92 choferes y se apoderan de autobuses, por el contrario les regala plazas automáticas y les garantiza impunidad por sus delitos.

El “peje” no usa la fuerza legítima del Estado contra los cárteles de la droga que son organizaciones criminales más poderosas que el Ejército mexicano, por el contrario les envía abrazos y los deja ir.

Por lo tanto es preocupante que se reprima a los presidentes municipales, que lo único que querían era solicitar audiencia; son autoridades electas por el pueblo en su correspondiente jurisdicción, electas igual que el “peje”, no cometían ningún delito, entonces no se justifica el arrojarles gas a la cara, ni aunque haya sido poquito como dijo el “peje” al día siguiente, donde afirmó: “Se dispersó una dosis moderada de aerosol defensivo, natural en el ambiente, que no puso en riesgo la vida de ninguna persona”; ¿pues qué quería este presidente?

EX MAGISTRADO EN RETIRO / famlopezs@hotmail.com