/ viernes 28 de enero de 2022

Dossier Mexiquense | Reto2023: aspirantes y posicionamiento en redes sociales


La disputa por la sucesión gubernamental ha comenzado muy temprano en el Estado de México y no podría ser de otra manera pues por muchos años, la entidad ha sido considerada el laboratorio de la sucesión presidencial del 2024. Quizá sea un exceso darle tal importancia a nuestro proceso, pero de que lo tiene, lo tiene: acá se forjo el mítico “Grupo Atlacomulco” para referirse, no sin cierta sorna al peculiar estilo de hacer política de los priistas, que en lo particular nunca han perdido la gubernatura desde que ganó el abuelo del actual priismo, me refiero al Partido Nacional Revolucionario, que por vez primera ganó la elección en 1925 bajo el mandato de Carlos Riva Palacio.

Muchas aguas han corrido bajo el puente histórico del poder político en el Estado de México, pero desde 1999, al menos, la oposición al partido hegemónico busca con denuedo ganar tan preciada joya. El triunfo de Alfredo del Mazo Maza fue el más apretado en los últimos veinte años y MORENA desde entonces ha fijado las apuestas en el Estado más poblado del país que junto con la Ciudad de México aportan casi una cuarta parte de su votación nacional. Justamente por ello, quien ha iniciado su largo periplo en la entidad ha sido el senador Higinio Martínez, quien arrancó su posicionamiento hace más de un año aprovechando la condición de mayoría absoluta que durante la LXIV Legislatura mantuvo su partido, permitiéndole impulsar una serie de reformas que le han permitido estar en constante vinculación con legisladores, presidentes municipales y a través del parlamento abierto con la sociedad civil interesada en la renovación de nuestro marco constitucional. Por su puesto, dicho impulso ha sido criticado por propios y extraños, pero el senador avanza con una franca connivencia con el Gobierno Estatal que lo apoya y hasta lo secunda en algunas actividades. No obstante, Higinio Martínez no el único aspirante dentro de MORENA y recientemente la empresa TechSoft presentó su primer reporte, en que se demuestra que los funcionarios federales tienen por su encargo, un mejor posicionamiento en redes sociales, que el senador Higinio Martínez.

En el caso del partido en el poder las preferencias no están tan claras y una primera definición pasa por el peculiar estilo que tiene el priismo histórico para destapar a sus candidatos, será hasta después del quinto informe de gobierno, cuando siguiendo los cánones del viejo modelo autoritario surjan señales más claras.

El reporte exhibe diversas formas de consulta, que van desde las publicaciones hasta los famosos likes y ahí se advierte no solo el impacto de los cargos públicos o de partido, sino las eventuales estrategias de difusión que cada uno sigue. El seguimiento a este modelo es único en el Estado de México y aparataría muchos elementos de análisis para determinar qué influye en las decisiones de los partidos al elegir a sus candidatos.

Como lo he venido señalando existen dos jugadas estratégicas en el futuro primero definir si el PAN decide ir solo o en coalición con el PRI, el PRD más los que se sumen. En el caso de que decida ir solo Enrique Vargas puede provocar un fenómeno muy similar al que genero Juan Zepeda en el 2017 y una elección fragmentada por varias candidaturas haría más barato el costo para el ganador ahí está el principal dilema para el líder panista y sus aliados en el gobierno. Para el experrdista, por el contrario, parece muy difícil que repita la estrategia del proceso anterior ahora con MC, pues a pesar de su gran campaña en Nezahualcóyotl no logró ganar tan importante plaza y eso dificultará su marco de acción en el 2023. En el caso de Nueva Alianza, PVEM y MC está claro que cualquier acuerdo pasa obligadamente por las negociaciones que se celebran en la cámara y en cuyo espacio estos partidos minoritarios constituyen la bisagra para construir cualquier mayoría parlamentaria. El propio PRD está dispuesto a sumarse a este singular fenómeno de “engordar la gallina o hacer el caldo gordo” para obtener del gobierno algún tipo de intercambio que evite su prematura sepultura en la entidad.

Este tipo de reportes permite observar a los actores políticos y su manejo en redes sociales y en las búsquedas de internet, y que si bien no son un oráculo ni una panacea, si nos ofrece un diagnostico relevante para comprender de mejor forma cómo eligen los partidos políticos a sus abanderados y quiénes son los más interesados en hacerse de tan preciada postulación.


La disputa por la sucesión gubernamental ha comenzado muy temprano en el Estado de México y no podría ser de otra manera pues por muchos años, la entidad ha sido considerada el laboratorio de la sucesión presidencial del 2024. Quizá sea un exceso darle tal importancia a nuestro proceso, pero de que lo tiene, lo tiene: acá se forjo el mítico “Grupo Atlacomulco” para referirse, no sin cierta sorna al peculiar estilo de hacer política de los priistas, que en lo particular nunca han perdido la gubernatura desde que ganó el abuelo del actual priismo, me refiero al Partido Nacional Revolucionario, que por vez primera ganó la elección en 1925 bajo el mandato de Carlos Riva Palacio.

Muchas aguas han corrido bajo el puente histórico del poder político en el Estado de México, pero desde 1999, al menos, la oposición al partido hegemónico busca con denuedo ganar tan preciada joya. El triunfo de Alfredo del Mazo Maza fue el más apretado en los últimos veinte años y MORENA desde entonces ha fijado las apuestas en el Estado más poblado del país que junto con la Ciudad de México aportan casi una cuarta parte de su votación nacional. Justamente por ello, quien ha iniciado su largo periplo en la entidad ha sido el senador Higinio Martínez, quien arrancó su posicionamiento hace más de un año aprovechando la condición de mayoría absoluta que durante la LXIV Legislatura mantuvo su partido, permitiéndole impulsar una serie de reformas que le han permitido estar en constante vinculación con legisladores, presidentes municipales y a través del parlamento abierto con la sociedad civil interesada en la renovación de nuestro marco constitucional. Por su puesto, dicho impulso ha sido criticado por propios y extraños, pero el senador avanza con una franca connivencia con el Gobierno Estatal que lo apoya y hasta lo secunda en algunas actividades. No obstante, Higinio Martínez no el único aspirante dentro de MORENA y recientemente la empresa TechSoft presentó su primer reporte, en que se demuestra que los funcionarios federales tienen por su encargo, un mejor posicionamiento en redes sociales, que el senador Higinio Martínez.

En el caso del partido en el poder las preferencias no están tan claras y una primera definición pasa por el peculiar estilo que tiene el priismo histórico para destapar a sus candidatos, será hasta después del quinto informe de gobierno, cuando siguiendo los cánones del viejo modelo autoritario surjan señales más claras.

El reporte exhibe diversas formas de consulta, que van desde las publicaciones hasta los famosos likes y ahí se advierte no solo el impacto de los cargos públicos o de partido, sino las eventuales estrategias de difusión que cada uno sigue. El seguimiento a este modelo es único en el Estado de México y aparataría muchos elementos de análisis para determinar qué influye en las decisiones de los partidos al elegir a sus candidatos.

Como lo he venido señalando existen dos jugadas estratégicas en el futuro primero definir si el PAN decide ir solo o en coalición con el PRI, el PRD más los que se sumen. En el caso de que decida ir solo Enrique Vargas puede provocar un fenómeno muy similar al que genero Juan Zepeda en el 2017 y una elección fragmentada por varias candidaturas haría más barato el costo para el ganador ahí está el principal dilema para el líder panista y sus aliados en el gobierno. Para el experrdista, por el contrario, parece muy difícil que repita la estrategia del proceso anterior ahora con MC, pues a pesar de su gran campaña en Nezahualcóyotl no logró ganar tan importante plaza y eso dificultará su marco de acción en el 2023. En el caso de Nueva Alianza, PVEM y MC está claro que cualquier acuerdo pasa obligadamente por las negociaciones que se celebran en la cámara y en cuyo espacio estos partidos minoritarios constituyen la bisagra para construir cualquier mayoría parlamentaria. El propio PRD está dispuesto a sumarse a este singular fenómeno de “engordar la gallina o hacer el caldo gordo” para obtener del gobierno algún tipo de intercambio que evite su prematura sepultura en la entidad.

Este tipo de reportes permite observar a los actores políticos y su manejo en redes sociales y en las búsquedas de internet, y que si bien no son un oráculo ni una panacea, si nos ofrece un diagnostico relevante para comprender de mejor forma cómo eligen los partidos políticos a sus abanderados y quiénes son los más interesados en hacerse de tan preciada postulación.

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