Este año, los Golden Globes estuvieron repletos de activismo y solidaridad, por lo que el evento es digno de mencionar al proyectar una imagen completamente opuesta a aquella que acostumbramos ver en este tipo de premiaciones.
Empecemos por el arribo de la mayoría de los invitados vestidos en color negro, derivado del movimiento #TimesUp, se trata de una iniciativa impulsada por las mujeres más poderosas de Hollywood –entre ellas Meryl Streep y Oprah Winfrey- con el fin de combatir el acoso sexual, el abuso y la discriminación de género en todos los sectores, no sólo de la industria cinematográfica. Pero eso no fue todo, las actrices involucradas invitaron a los espectadores de los “Globos de Oro” a que se sumaran a dicha iniciativa subiendo sus fotografías vestidos de negro con el hashtag #WhyWeWearBlack a fin de concentrar la atención en los asuntos que aborda el movimiento; lo que parece ser una estrategia brillante, ya que en vez de pagar por el lanzamiento y promoción del movimiento para posicionar su imagen institucional, hicieron uso de los “reflectores” que naturalmente tendrían en dicho evento –y tienen en su día a día- y en consecuencia, ponerlos en el movimiento que ellas mismas están promoviendo y todo sin poner dinero.
Así, actrices como Michelle Williams, Emma Watson, Meryl Streep, entre otras, llevaron cada una como invitado a un activista relacionado con los movimientos que están encabezando sobre justicia de género y raza, con la finalidad de cambiar el enfoque de los agresores hacia aquellos que han superado este tipo de problemáticas o bien encontrar soluciones; por lo que este tipo de coherencia entre sus discursos y sus acciones empata con su imagen y la de los movimientos que muchas de estas actrices han apoyado a lo largo de sus carreras.
Y esto no fue todo, uno de los momentos que más captó la atención de las redes sociales, y en general del mundo, es el poderoso discurso de Oprah Winfrey, quien recibió el premio Cecile B deMille por su trayectoria. De principio a fin, sus palabras fueron claras y su mensaje muy concreto, en menos de ocho minutos y medio habló de su experiencia de vida y mencionó ejemplos al respecto sobre personajes que impactaron su vida y como ese momento impactaría el de muchas niñas como ella, también no pudo dejar la política de lado por lo que –sin hacerlo- habló del momento que se vive con Donald Trump como presidente al agradecer a la Asociación de Prensa Extranjera de Hollywood, encargada del evento, ya que “todos sabemos que la prensa está siendo hostigada últimamente. También sabemos que es la dedicación insaciable por descubrir la verdad absoluta que nos impide hacer la vista gorda ante la corrupción y la injusticia…” para terminar dicha frase con un “lo que sé con certeza es que hablar tu verdad es la herramienta más poderosa que tenemos.” Esto claro en referencia no sólo a las supuestas “fake news” – o noticias falsas- de Trump, sino también a la verdad de todas aquellas mujeres que han sido víctimas. Un discurso que en verdad vale la pena ver y analizar.
Sin embargo, eso no fue todo para Oprah. Desde el inicio de la noche, el presentador Seth Meyers buscó catapultar su imagen -tal vez en broma, tal vez en serio- como potencial candidata para contender en las próximas elecciones estadounidenses del 2020 con Tom Hanks como vicepresidente, derivado de que en 2011 él hizo bromas al respecto a Donald Trump en la cena de corresponsales de la Casa Blanca. El rumor de una posible candidatura no es nuevo, pero entre su discurso y la broma de Meyers, éste tomó fuerza. Al final del día su imagen es sólida, empática y está bien cimentada en su audiencia, sin embargo, carece de experiencia política al igual que Trump y eso podría ser un gran factor en contra. Finalmente, la empresaria, conductora, filántropa y actriz desmintió los rumores al respecto, aunque los demócratas podrían verla cómo el potencial antídoto antiTrump.
Twitter: @Mar_Naa
