/ lunes 5 de abril de 2021

Mirada Empresarial | Bienestar y Riqueza

Tras padecer un 2020 turbulento por situaciones de índole social, económica, política e incluso de salud; y al concluir un primer trimestre de 2021 a un ritmo lento, nos damos cuenta que requerimos de contar con bases sólidas para poder afrontar las crisis que actualmente vivimos y las que se pueden presentar en años venideros.

Esta semana que recién concluyó, nos dio la oportunidad de tener mayor espacio para la recreación, la relajación y la distracción, todo ello dentro de un ambiente con una fuerte carga espiritual y de paz. Siendo una de las conclusiones, la necesidad de generar mayor bienestar para las ciudadanas y los ciudadanos de este país.

Desde el sector económico mexiquense conocemos de la gran responsabilidad que tenemos como generadores de fuentes de empleo y por ende como generadores de bienestar y riqueza.

Sabemos que en el sector empresarial somos responsables de generar un círculo virtuoso que detone en mejores condiciones de vida para nuestros colaboradores; es indispensable profesionalizar la diversas áreas que integran las empresas, creando productos de mayor calidad con eficiencia y a una mayor velocidad, lo que se traducirá en un mayor consumo dentro del mercado y dando como resultado un incremento en los salarios de nuestros trabajadores.

Con todos estos factores, como nación seremos capaces de incrementar de manera sustancial el Producto Interno Bruto nacional, lo que tendrá como resultado mejores condiciones de vida como nación y como ciudadanos.

La epidemia nos ha dado grandes problemáticas, sin embargo, hemos demostrado una enorme capacidad de adaptación, hemos encontrado soluciones a todos y cada uno de los problemas a los que nos hemos enfrentado trabajando de manera más cercana con nuestros colaboradores.

Con base a datos proporcionados por el INEGI, el 25 por ciento de los ingresos de los hogares, además del trabajo provienen de programas del gobierno, el 13 por ciento de una jubilación o pensión, el 5 por ciento se apoyan de personas que viven en otro país y el 6.1 por ciento de la ayuda de personas que viven en algún otro punto del país.

Es indispensable que los sueldos y salarios cubran las necesidades básicas de la población, sin que exista la necesidad de apoyos, programas o ayudas de instituciones o personas; todo ello partiendo de una redistribución de la riqueza más justa, comenzando con la profesionalización de las empresas y con ello colaboradores más preparados y con salarios mejores.

El reto es grande pero no es imposible de superar, la meta es alta pero lograremos cumplirla; el sector económico es un aliado de México.


Tras padecer un 2020 turbulento por situaciones de índole social, económica, política e incluso de salud; y al concluir un primer trimestre de 2021 a un ritmo lento, nos damos cuenta que requerimos de contar con bases sólidas para poder afrontar las crisis que actualmente vivimos y las que se pueden presentar en años venideros.

Esta semana que recién concluyó, nos dio la oportunidad de tener mayor espacio para la recreación, la relajación y la distracción, todo ello dentro de un ambiente con una fuerte carga espiritual y de paz. Siendo una de las conclusiones, la necesidad de generar mayor bienestar para las ciudadanas y los ciudadanos de este país.

Desde el sector económico mexiquense conocemos de la gran responsabilidad que tenemos como generadores de fuentes de empleo y por ende como generadores de bienestar y riqueza.

Sabemos que en el sector empresarial somos responsables de generar un círculo virtuoso que detone en mejores condiciones de vida para nuestros colaboradores; es indispensable profesionalizar la diversas áreas que integran las empresas, creando productos de mayor calidad con eficiencia y a una mayor velocidad, lo que se traducirá en un mayor consumo dentro del mercado y dando como resultado un incremento en los salarios de nuestros trabajadores.

Con todos estos factores, como nación seremos capaces de incrementar de manera sustancial el Producto Interno Bruto nacional, lo que tendrá como resultado mejores condiciones de vida como nación y como ciudadanos.

La epidemia nos ha dado grandes problemáticas, sin embargo, hemos demostrado una enorme capacidad de adaptación, hemos encontrado soluciones a todos y cada uno de los problemas a los que nos hemos enfrentado trabajando de manera más cercana con nuestros colaboradores.

Con base a datos proporcionados por el INEGI, el 25 por ciento de los ingresos de los hogares, además del trabajo provienen de programas del gobierno, el 13 por ciento de una jubilación o pensión, el 5 por ciento se apoyan de personas que viven en otro país y el 6.1 por ciento de la ayuda de personas que viven en algún otro punto del país.

Es indispensable que los sueldos y salarios cubran las necesidades básicas de la población, sin que exista la necesidad de apoyos, programas o ayudas de instituciones o personas; todo ello partiendo de una redistribución de la riqueza más justa, comenzando con la profesionalización de las empresas y con ello colaboradores más preparados y con salarios mejores.

El reto es grande pero no es imposible de superar, la meta es alta pero lograremos cumplirla; el sector económico es un aliado de México.


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