/ martes 16 de febrero de 2021

Panorama Político | Semáforo Naranja

“No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio": Charles Darwin

Las autoridades gubernamentales mexiquenses y de la Ciudad de México han determinado el regreso al semáforo naranja con la condición de alerta permanente, es decir que la gravedad de los contagios por coronavirus han disminuido un poco pero no está controlada totalmente la situación.

No olvidemos que el semáforo determinado por las autoridades federales consiste en un cambio de color respecto a la cantidad de camas disponibles en los hospitales, sin embargo esto no quiere decir que los afectados son menos, pues muchos de los ciudadanos que se han contagiado prefieren quedarse en casa, tratando de resolver su situación con apoyo médico particular.

Escribo lo anterior porque es importante que todos los ciudadanos sepan que la pandemia sigue afectando a muchísimas personas y la situación aún es muy grave en nuestra entidad, en la región y en el país.

Por ello no se debe bajar la guardia, las autoridades deben informar e implementar acciones para que la gente esté alerta, sepa qué pasa y actúe en consecuencia, los ciudadanos deben evitar reunirse, hacer fiestas y tomar las medidas pertinentes de sana distancia y sanidad para evitar contagiarse.

Sobre todo porque este domingo es el día establecido para la celebración del amor y la amistad, lo que dé alguna manera genera la posibilidad de que las personas busquen encontrarse y celebrar, poniendo y poniéndose en riesgo.

No es por el día en sí, pues este si estuviéramos en condiciones de normalidad sería como en muchas ocasiones ha sido, un día de mucho actividad familiar, social, comercial, tiempo de encuentro para festejar con los amigos y los seres queridos, pero ahora no es así, debemos ser muy responsables.

El mayor crecimiento de contagios y muertes se dio durante los meses últimos por las celebraciones que muchos no evitaron. Así desde el día de las madres en mayo y más grave en diciembre con las fiestas de Navidad y Año Nuevo han generado una ola expansiva de afectaciones.

Ahora que se ha determinado el regreso al semáforo naranja a partir del próximo lunes 15 de febrero, corre la tentación de romper las restricciones por el día de San Valentín, en estricto sentido aún seguimos en semáforo rojo hasta el inicio de la próxima semana.

Así como ahora tenemos que restringir celebraciones, reuniones y encuentros, pronto en lo concerniente a el proceso electoral tendremos que hacer lo propio y generar los

protocolos y acciones necesarias para que las elecciones se lleven a cabo de manera que se eviten contagios y gestaciones a la salud.

Aún el recorrido de esta pandemia, parece que será largo y que tendremos que aprender a vivir con este virus de manera permanente, por lo que como especie humana tendremos que adaptarnos para sobrevivir.

Sigamos cuidándonos, con paciencia, buscando la oportunidad de crecer, mejorar, aprender. El semáforo naranja solo representa un cambio leve en algunas restricciones, pero no es señal de normalidad, permiso para volver a lo cotidiano.

@JorgeInzunzaPAN

Facebook: Jorge Inzunza.

“No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio": Charles Darwin

Las autoridades gubernamentales mexiquenses y de la Ciudad de México han determinado el regreso al semáforo naranja con la condición de alerta permanente, es decir que la gravedad de los contagios por coronavirus han disminuido un poco pero no está controlada totalmente la situación.

No olvidemos que el semáforo determinado por las autoridades federales consiste en un cambio de color respecto a la cantidad de camas disponibles en los hospitales, sin embargo esto no quiere decir que los afectados son menos, pues muchos de los ciudadanos que se han contagiado prefieren quedarse en casa, tratando de resolver su situación con apoyo médico particular.

Escribo lo anterior porque es importante que todos los ciudadanos sepan que la pandemia sigue afectando a muchísimas personas y la situación aún es muy grave en nuestra entidad, en la región y en el país.

Por ello no se debe bajar la guardia, las autoridades deben informar e implementar acciones para que la gente esté alerta, sepa qué pasa y actúe en consecuencia, los ciudadanos deben evitar reunirse, hacer fiestas y tomar las medidas pertinentes de sana distancia y sanidad para evitar contagiarse.

Sobre todo porque este domingo es el día establecido para la celebración del amor y la amistad, lo que dé alguna manera genera la posibilidad de que las personas busquen encontrarse y celebrar, poniendo y poniéndose en riesgo.

No es por el día en sí, pues este si estuviéramos en condiciones de normalidad sería como en muchas ocasiones ha sido, un día de mucho actividad familiar, social, comercial, tiempo de encuentro para festejar con los amigos y los seres queridos, pero ahora no es así, debemos ser muy responsables.

El mayor crecimiento de contagios y muertes se dio durante los meses últimos por las celebraciones que muchos no evitaron. Así desde el día de las madres en mayo y más grave en diciembre con las fiestas de Navidad y Año Nuevo han generado una ola expansiva de afectaciones.

Ahora que se ha determinado el regreso al semáforo naranja a partir del próximo lunes 15 de febrero, corre la tentación de romper las restricciones por el día de San Valentín, en estricto sentido aún seguimos en semáforo rojo hasta el inicio de la próxima semana.

Así como ahora tenemos que restringir celebraciones, reuniones y encuentros, pronto en lo concerniente a el proceso electoral tendremos que hacer lo propio y generar los

protocolos y acciones necesarias para que las elecciones se lleven a cabo de manera que se eviten contagios y gestaciones a la salud.

Aún el recorrido de esta pandemia, parece que será largo y que tendremos que aprender a vivir con este virus de manera permanente, por lo que como especie humana tendremos que adaptarnos para sobrevivir.

Sigamos cuidándonos, con paciencia, buscando la oportunidad de crecer, mejorar, aprender. El semáforo naranja solo representa un cambio leve en algunas restricciones, pero no es señal de normalidad, permiso para volver a lo cotidiano.

@JorgeInzunzaPAN

Facebook: Jorge Inzunza.