/ domingo 13 de diciembre de 2020

Panorama Político | Uniendo fuerzas para salvar a México

“Si estamos juntos no hay nada imposible. Si estamos divididos todo fallará”: Winston Churchill.

Nuestro país se encuentra viviendo tiempos de amargura por múltiples motivos, principalmente de índole política y económica. Desde que hubo cambio de gobierno hace dos años las cosas no van bien.

En lo económico hemos decrecido en lugar de avanzar, desde antes de la pandemia ya se vislumbraban escenarios que situaban nuestra a nuestra economía en un creciente deterioro que nos llevaría a estar por debajo de cero.

Las expectativas empeoraron con decisiones políticas del presidente de la República quien con decisiones autoritarias canceló los proyectos de construcción del Aeropuerto de Texcoco, obras de empresas extranjeras que ya habían invertido mucho dinero en ellas, inclusive las empresas generadoras de energías limpias sufrieron un revés.

Todo ello, llevó a perder la confianza de los inversores, los reveses de las calificadoras por la pérdida del nivel de confianza afectó los estándares crediticios, bajando la calificación del país, haciendo que las inversiones se fueran a países que les dieron más garantías, certeza y seguridad jurídica.

No se diga la inseguridad que padecemos, el trato cercano que se le dispone a delincuentes reconocidos, por parte de autoridades gubernamentales, incluido el presidente de la República. A todo ello, debemos sumar los males generados por la pandemia de Coronavirus, que cada vez genera más contagios y muertes.

El Ejecutivo Federal se inmiscuido en la vida orgánica de los otros poderes. En la cámara de los diputados pasa sin mayor discusión las iniciativas que manda, las cuales van deformando la vida institucional del país.

Las más recientes que afectan la autonomía del Banco de México, pone en riesgo el manejo de recursos que puede generar lavado de dinero a gran escala, o la del Poder Judicial el cual altera la esencia de poder autónomo y le da facultades discrecionales.

Con la votación a favor de la consulta contra los expresidentes de la República la Suprema Corte de Justicia de la Nación exhibió que su mayoría se encuentra sometida a otro poder, las presiones políticas, mediáticas a través de las conferencias mañaneras surtieron efectos en los ministros que se alinearon al capricho del ejecutivo.

“Si estamos juntos no hay nada imposible. Si estamos divididos todo fallará”: Winston Churchill.

Nuestro país se encuentra viviendo tiempos de amargura por múltiples motivos, principalmente de índole política y económica. Desde que hubo cambio de gobierno hace dos años las cosas no van bien.

En lo económico hemos decrecido en lugar de avanzar, desde antes de la pandemia ya se vislumbraban escenarios que situaban nuestra a nuestra economía en un creciente deterioro que nos llevaría a estar por debajo de cero.

Las expectativas empeoraron con decisiones políticas del presidente de la República quien con decisiones autoritarias canceló los proyectos de construcción del Aeropuerto de Texcoco, obras de empresas extranjeras que ya habían invertido mucho dinero en ellas, inclusive las empresas generadoras de energías limpias sufrieron un revés.

Todo ello, llevó a perder la confianza de los inversores, los reveses de las calificadoras por la pérdida del nivel de confianza afectó los estándares crediticios, bajando la calificación del país, haciendo que las inversiones se fueran a países que les dieron más garantías, certeza y seguridad jurídica.

No se diga la inseguridad que padecemos, el trato cercano que se le dispone a delincuentes reconocidos, por parte de autoridades gubernamentales, incluido el presidente de la República. A todo ello, debemos sumar los males generados por la pandemia de Coronavirus, que cada vez genera más contagios y muertes.

El Ejecutivo Federal se inmiscuido en la vida orgánica de los otros poderes. En la cámara de los diputados pasa sin mayor discusión las iniciativas que manda, las cuales van deformando la vida institucional del país.

Las más recientes que afectan la autonomía del Banco de México, pone en riesgo el manejo de recursos que puede generar lavado de dinero a gran escala, o la del Poder Judicial el cual altera la esencia de poder autónomo y le da facultades discrecionales.

Con la votación a favor de la consulta contra los expresidentes de la República la Suprema Corte de Justicia de la Nación exhibió que su mayoría se encuentra sometida a otro poder, las presiones políticas, mediáticas a través de las conferencias mañaneras surtieron efectos en los ministros que se alinearon al capricho del ejecutivo.