La Universidad Autónoma del Estado de México, institución que genera confianza
La reciente encuesta de “Confianza en instituciones 2108” realizada por la Consulta Mitofsky ubicó a la Presidencia, Diputados y Partidos Políticos como las instituciones en México con peor calificación en un índice de confianza (con 5.1%, cada una), mientras que los Senadores alcanzaron 5.3 puntos, seguidos de los sindicatos y la policía, con 5.4 y 5.5 puntos respectivamente.
En contraste, con un alto índice de confianza se ubican a las Universidades, la Iglesia y el Ejército con 7.4 puntos, 7.2 y 7.0, respectivamente. En la cuarta posición se ubicaron los medios, las estaciones de radio y las redes sociales.
En los últimos años, la conciencia en cuanto a la importancia de la responsabilidad social de las Universidades en el país ha crecido, porque en ellas se concentran la instrucción del conocimiento, innovación, arte, talento, generación de la investigación, la inclusión de principios y valores, pero sobre todo se desarrollan los perfiles profesionales que se incorporan al sector productivo nacional e internacional. Por ello la Universidad Autónoma del Estado de México es ejemplo de esa conciencia y como decía el filósofo español José Ortega y Gasset: “en la construcción de la universidad hay que partir del estudiante, no del saber ni del profesor”
En estudios de UNESCO y del Banco Interamericano de Desarrollo (2003) consideran que la responsabilidad social universitaria es “la clave para lograr un verdadero cambio en la enseñanza superior en nuestro país, a fin de que los futuros líderes y profesionales de la región tengan siempre en mente la ética y el desarrollo participativo como brújula en su vida laboral”.
Finalmente, la razón de ser de la Universidad Pública es la legitimación del conocimiento y en consecuencia su función social es garantizar que el egresado que ostenta su título profesional haya cumplido con los niveles a los cuales el educando fue sometido.
En este sentido la entidad mexiquense tiene un baluarte en la UAEMex dignamente encabezada por el Rector Alfredo Barrera Baca, quien ha venido impulsando cambios de fondo en la institución, como ejemplo: las reformas a la legislación universitaria que están próximas a presentarse ante la Legislatura local o en otro contexto la participación más activa de la comunidad universitaria en los procesos de elección sobre los Directores de los organismos académicos, y más evidente el tener ventanillas para que la sociedad pueda contratar los servicios, productos o proyectos con la institución en una alianza con la ciudadanía y las empresas.
Por ello celebro que como muchos mexicanos que somos egresados de una Universidad Publica, sigamos depositando nuestra confianza en estas generosas instituciones de hombres y mujeres con una profunda vocación de servicio y compromiso social, como ocurre en la UAEMex y hago votos porque todos los universitarios nos solidaricemos con la institución en torno a su máxima autoridad gobierno que es el Consejo Universitario y el Rector, para que juntos trascendamos en esta nueva etapa de trasformación.
