/ miércoles 28 de noviembre de 2018

Política y Negocios


Brexit: el divorcio inminente

Después de una larga negociación de más de un año y medio entre el Reino Unido (RU) y el resto de los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) parece ser que ahora sí ya no hay marcha atrás. El 29 de marzo del 2019 será oficial la salida de dicho país de este bloque comercial después de que el RU activara el Artículo 50 tras el referendo realizado desde el 2016.

Durante el fin de semana pasado se logró el acuerdo que dará terminación al “matrimonio” de varias décadas entre el RU y la UE. Ahora lo que viene es la aprobación en el parlamento británico, la cual no será nada fácil. Desde que se dio la consulta ciudadana para seguir o salirse de la UE, la clase política y parlamentaria estuvo dividida en proeuropeos y euroescépticos. Por lo que ahora la primer ministra se enfrentará a un voto dividido y donde la única opción es convencer a los adversarios políticos.

Se tiene de hoy a los primeros días de diciembre para que se logre el voto parlamentario para que se autorice el acuerdo. Pero hay tal división que para algunos será el pretexto perfecto para buscar “enterrar” la diplomacia de May. La ministra requiere una mayoría simple de 650 escaños de la Cámara de los Comunes donde 90 parlamentarios son conservadores y desde hace tiempo han dicho que rechazarían cualquier acuerdo que no fuera benéfico para el RU. Sin embargo, nunca se logró entender que salirse implicaría un alto costo, no sólo monetario sino de concesiones. Por lo que se tuvieron que establecer dos documentos: I) De 585 páginas donde se definen los términos de la salida y establece un monto de $50,000 millones de dólares que el RU deberá pagar, los derechos ciudadanos y la solución para continuar con la frontera abierta entre Irlanda del Norte con la República de Irlanda y II) La declaración política donde se estipula la futura relación comercial y de seguridad entre el RU y la UE después del divorcio.

¿Qué pasaría si sí o si no se vota a favor en el parlamento británico?

En caso afirmativo se presentaría a principios del 2019 el Proyecto de Salida del RU ante la UE al Parlamento Europeo para que allí también se vote y con mayoría simple se aprobaría. Es decir, 20 países que representan al 65% de la población deben dar el “sí”. A partir del 29 de marzo del año entrante comenzaría un periodo de transición que concluiría aproximadamente para el año 2020.

En caso negativo, el gobierno británico tendría hasta 21 días para presentar un nuevo plan y esto se convertiría en un camino sin fin. Por lo que sólo resta esperar lo que deciden y que México se vaya preparando el terreno para un acuerdo bilateral con el RU dados los lazos comerciales y de inversión que existen.

Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Departamento de Estudios Empresariales

Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribel.contreras@ibero.mx

twitter: @Aribel007


Brexit: el divorcio inminente

Después de una larga negociación de más de un año y medio entre el Reino Unido (RU) y el resto de los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) parece ser que ahora sí ya no hay marcha atrás. El 29 de marzo del 2019 será oficial la salida de dicho país de este bloque comercial después de que el RU activara el Artículo 50 tras el referendo realizado desde el 2016.

Durante el fin de semana pasado se logró el acuerdo que dará terminación al “matrimonio” de varias décadas entre el RU y la UE. Ahora lo que viene es la aprobación en el parlamento británico, la cual no será nada fácil. Desde que se dio la consulta ciudadana para seguir o salirse de la UE, la clase política y parlamentaria estuvo dividida en proeuropeos y euroescépticos. Por lo que ahora la primer ministra se enfrentará a un voto dividido y donde la única opción es convencer a los adversarios políticos.

Se tiene de hoy a los primeros días de diciembre para que se logre el voto parlamentario para que se autorice el acuerdo. Pero hay tal división que para algunos será el pretexto perfecto para buscar “enterrar” la diplomacia de May. La ministra requiere una mayoría simple de 650 escaños de la Cámara de los Comunes donde 90 parlamentarios son conservadores y desde hace tiempo han dicho que rechazarían cualquier acuerdo que no fuera benéfico para el RU. Sin embargo, nunca se logró entender que salirse implicaría un alto costo, no sólo monetario sino de concesiones. Por lo que se tuvieron que establecer dos documentos: I) De 585 páginas donde se definen los términos de la salida y establece un monto de $50,000 millones de dólares que el RU deberá pagar, los derechos ciudadanos y la solución para continuar con la frontera abierta entre Irlanda del Norte con la República de Irlanda y II) La declaración política donde se estipula la futura relación comercial y de seguridad entre el RU y la UE después del divorcio.

¿Qué pasaría si sí o si no se vota a favor en el parlamento británico?

En caso afirmativo se presentaría a principios del 2019 el Proyecto de Salida del RU ante la UE al Parlamento Europeo para que allí también se vote y con mayoría simple se aprobaría. Es decir, 20 países que representan al 65% de la población deben dar el “sí”. A partir del 29 de marzo del año entrante comenzaría un periodo de transición que concluiría aproximadamente para el año 2020.

En caso negativo, el gobierno británico tendría hasta 21 días para presentar un nuevo plan y esto se convertiría en un camino sin fin. Por lo que sólo resta esperar lo que deciden y que México se vaya preparando el terreno para un acuerdo bilateral con el RU dados los lazos comerciales y de inversión que existen.

Coordinadora

Licenciatura en Administración de Negocios Internacionales

Departamento de Estudios Empresariales

Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribel.contreras@ibero.mx

twitter: @Aribel007