/ miércoles 6 de diciembre de 2017

Política y Negocios

A escasos días de las elecciones de Honduras, la crisis política aumenta. Nos es muy familiar el caso de fraude electoral del que este país centroamericano ha sido víctima y no por ellos, sino por nosotros. Es terrible que su Constitución haya sido modificada para permitir la reelección y con esto, dar puerta a la gran ambición del poder y hacer de algunos gobiernos, una dictadura. El actual presidente de dicho país se postuló para ser reelegido y entre gritos y sombrerazos, supuestamente ganó.

¡Es vergonzoso que en países en desarrollo, esta práctica ya se haga costumbre! Y tomemos nota para que esto no nos suceda en el 2018. Pues dos de los candidatos se declararon vencedores antes de que su Tribunal Supremo Electoral dijera quién había sido el ganador. Y aunque entre dos candidatos tienen un margen del voto sumamente cerrado, el voto se dispersó demasiado por tener a nueve candidatos. [Parece que les hablo de México, pero no].

Tanto Estados Unidos como la Unión Europea llevaron observadores, pero no se han pronunciado al respecto. La oposición hace un llamado a la Organización de los Estados Americanos para que intervenga de manera contundente, para que determine si fue o no una elección válida ya que: dos partidos no pudieron opinar sobre la selección de la empresa contratada para llevar a cabo el proceso, la cual fue seleccionada sin licitación; “casualmente” hubo un fallo en el sistema el día de las elecciones alrededor de las seis de la tarde; de una tendencia del 71% para la noche se revirtió con votos “que aparecieron” en el conteo rápido; votaron personas que están muertas; y entre el 28 y el 30 de noviembre se identificaron anomalías con más de cinco mil actas llamadas “zona de fraude”. [Sin duda, nuevamente nos suena esto familiar].

Ante las manifestaciones violentas en la calle, Honduras está en un caos inaceptable, por lo que no hay un estado de derecho. Muestra de ello es el “toque de queda” que acordó el Consejo de Ministros del país durante 10 días a partir del 2 de diciembre (desde las 6:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana), el cual prohíbe la libre circulación de personas. No se sabe con claridad cómo acabará esta situación, pero sí es evidente que la mano negra en las elecciones es la responsable de este terremoto político en dicho país. Aunque si ocurre como siempre pasa en México, después de la tormenta viene la calma por lo que la corrupción y el fraude electoral sobrevivirán por encima de la legalidad y la voluntad del pueblo.

 

“Aprendamos de las experiencias ajenas

para no repetir en el 2018 la misma historia una y otra vez.”

 

[Si gustan hoy seguirme en el programa de 21 Noticias de Capital 21, los espero a las 21.15 horas para platicar sobre el status actual de la relación bilateral Estados Unidos-Corea del Norte, los espero en http://www.capital21.cdmx.gob.mx/tv-en-vivo/].

 

Académica del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribelcontreras@ibero.mx

A escasos días de las elecciones de Honduras, la crisis política aumenta. Nos es muy familiar el caso de fraude electoral del que este país centroamericano ha sido víctima y no por ellos, sino por nosotros. Es terrible que su Constitución haya sido modificada para permitir la reelección y con esto, dar puerta a la gran ambición del poder y hacer de algunos gobiernos, una dictadura. El actual presidente de dicho país se postuló para ser reelegido y entre gritos y sombrerazos, supuestamente ganó.

¡Es vergonzoso que en países en desarrollo, esta práctica ya se haga costumbre! Y tomemos nota para que esto no nos suceda en el 2018. Pues dos de los candidatos se declararon vencedores antes de que su Tribunal Supremo Electoral dijera quién había sido el ganador. Y aunque entre dos candidatos tienen un margen del voto sumamente cerrado, el voto se dispersó demasiado por tener a nueve candidatos. [Parece que les hablo de México, pero no].

Tanto Estados Unidos como la Unión Europea llevaron observadores, pero no se han pronunciado al respecto. La oposición hace un llamado a la Organización de los Estados Americanos para que intervenga de manera contundente, para que determine si fue o no una elección válida ya que: dos partidos no pudieron opinar sobre la selección de la empresa contratada para llevar a cabo el proceso, la cual fue seleccionada sin licitación; “casualmente” hubo un fallo en el sistema el día de las elecciones alrededor de las seis de la tarde; de una tendencia del 71% para la noche se revirtió con votos “que aparecieron” en el conteo rápido; votaron personas que están muertas; y entre el 28 y el 30 de noviembre se identificaron anomalías con más de cinco mil actas llamadas “zona de fraude”. [Sin duda, nuevamente nos suena esto familiar].

Ante las manifestaciones violentas en la calle, Honduras está en un caos inaceptable, por lo que no hay un estado de derecho. Muestra de ello es el “toque de queda” que acordó el Consejo de Ministros del país durante 10 días a partir del 2 de diciembre (desde las 6:00 de la tarde hasta las 6:00 de la mañana), el cual prohíbe la libre circulación de personas. No se sabe con claridad cómo acabará esta situación, pero sí es evidente que la mano negra en las elecciones es la responsable de este terremoto político en dicho país. Aunque si ocurre como siempre pasa en México, después de la tormenta viene la calma por lo que la corrupción y el fraude electoral sobrevivirán por encima de la legalidad y la voluntad del pueblo.

 

“Aprendamos de las experiencias ajenas

para no repetir en el 2018 la misma historia una y otra vez.”

 

[Si gustan hoy seguirme en el programa de 21 Noticias de Capital 21, los espero a las 21.15 horas para platicar sobre el status actual de la relación bilateral Estados Unidos-Corea del Norte, los espero en http://www.capital21.cdmx.gob.mx/tv-en-vivo/].

 

Académica del Departamento de Estudios Empresariales de la Universidad Iberoamericana

Experta en asuntos internacionales

aribelcontreras@ibero.mx