/ miércoles 4 de agosto de 2021

Política y Negocios | Regreso a clases presencial, ¿sí o no?

¿Por qué sí?

Por una reactivación económica.

Por la diplomacia de las vacunas.

Por el portafolio de vacunas existentes.


¿Por qué no?

*Porque el mundo está en pandemia.

*Porque a nivel global, ya casi llegamos a los 200 millones de casos confirmados. Sin embargo, hay que considerar que hay un sub registro a nivel mundial.

*Porque se han inoculado más de 4 mil millones de vacunas pero éstas sólo están concentradas en un grupo reducido de países.

*Porque de las 11 variantes identificadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay 4 que son consideradas de preocupación: alfa, beta, gamma y delta.

*Porque los estudios científicos arrojan que esta última variante es mucho más agresiva que cualquier otra, un portador contagia a más personas, se ubica en más de 200 países y uno de éstos es México.

*Porque nuestro país se ubica en la posición número 16 –a nivel mundial- de número de casos con un porcentaje de casi el 8% de mortalidad.

*Porque aunque se ha logrado vacunar completamente a un 20% y parcialmente a un 17% de la población en México, la población menor de 30 años aún no está vacunada.

*Porque la OMS dice que se requiere mínimo de un 70% de la población vacunada para hablar de una inmunidad de rebaño.

*Porque la experiencia internacional de insistir en que se regresara a las aulas nos dejó la lección que no pasaban ni dos semanas, cuando los estudiantes regresaban a sus hogares.

*Porque el semáforo verde se movió cuando no se tenía que mover.

*Porque la tercera ola viene más fuerte por las vacaciones, porque la gente vacunada se ha confiado y porque la gente cree que su hartazgo de usar cubrebocas vale más que sí usarlo.

*Porque los que asistirán a clases, justo pertenecen al grupo poblacional que no están vacunados.

*Porque en México no está aún autorizada la vacuna Pfizer para vacunar al grupo de edad de 12 a 18 años.

*Porque aún están en ensayos clínicos varias vacunas para usarse en niños.

*Porque las personas asintómaticas pueden llevar el virus de la institución educativa a su hogar.



¿Qué hacer?

+Mantenernos informados de fuentes oficiales.

+No caer en la información compartida sin una fuente de referencia.

+Tener consciencia de que todos somos actores clave para que cada quien haga lo que le corresponde.

+Seguir con las medidas sanitarias.

+Crear políticas públicas enfocadas a brindar los mecanismos y las herramientas para evitar un agudo rezago educativo.


Hace dos semanas hablé en El Sol de México sobre un nuevo concepto de mi autoría denominado vacunacracia (Vacunacracia global). Éste se refiere a crear un sistema gubernamental, administrativo, de conciencia personal y acción empresarial. Ya que sí y sólo si todos hacemos nuestra parte, la pandemia podrá estar contenida. Hace un año se decía que la pandemia duraría dos años y que podría estar controlada para este año por las vacunas. Pero no es así. Durará el tiempo que nosotros como seres humanos decidamos lo que tenga que durar.

¿Por qué sí?

Por una reactivación económica.

Por la diplomacia de las vacunas.

Por el portafolio de vacunas existentes.


¿Por qué no?

*Porque el mundo está en pandemia.

*Porque a nivel global, ya casi llegamos a los 200 millones de casos confirmados. Sin embargo, hay que considerar que hay un sub registro a nivel mundial.

*Porque se han inoculado más de 4 mil millones de vacunas pero éstas sólo están concentradas en un grupo reducido de países.

*Porque de las 11 variantes identificadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), hay 4 que son consideradas de preocupación: alfa, beta, gamma y delta.

*Porque los estudios científicos arrojan que esta última variante es mucho más agresiva que cualquier otra, un portador contagia a más personas, se ubica en más de 200 países y uno de éstos es México.

*Porque nuestro país se ubica en la posición número 16 –a nivel mundial- de número de casos con un porcentaje de casi el 8% de mortalidad.

*Porque aunque se ha logrado vacunar completamente a un 20% y parcialmente a un 17% de la población en México, la población menor de 30 años aún no está vacunada.

*Porque la OMS dice que se requiere mínimo de un 70% de la población vacunada para hablar de una inmunidad de rebaño.

*Porque la experiencia internacional de insistir en que se regresara a las aulas nos dejó la lección que no pasaban ni dos semanas, cuando los estudiantes regresaban a sus hogares.

*Porque el semáforo verde se movió cuando no se tenía que mover.

*Porque la tercera ola viene más fuerte por las vacaciones, porque la gente vacunada se ha confiado y porque la gente cree que su hartazgo de usar cubrebocas vale más que sí usarlo.

*Porque los que asistirán a clases, justo pertenecen al grupo poblacional que no están vacunados.

*Porque en México no está aún autorizada la vacuna Pfizer para vacunar al grupo de edad de 12 a 18 años.

*Porque aún están en ensayos clínicos varias vacunas para usarse en niños.

*Porque las personas asintómaticas pueden llevar el virus de la institución educativa a su hogar.



¿Qué hacer?

+Mantenernos informados de fuentes oficiales.

+No caer en la información compartida sin una fuente de referencia.

+Tener consciencia de que todos somos actores clave para que cada quien haga lo que le corresponde.

+Seguir con las medidas sanitarias.

+Crear políticas públicas enfocadas a brindar los mecanismos y las herramientas para evitar un agudo rezago educativo.


Hace dos semanas hablé en El Sol de México sobre un nuevo concepto de mi autoría denominado vacunacracia (Vacunacracia global). Éste se refiere a crear un sistema gubernamental, administrativo, de conciencia personal y acción empresarial. Ya que sí y sólo si todos hacemos nuestra parte, la pandemia podrá estar contenida. Hace un año se decía que la pandemia duraría dos años y que podría estar controlada para este año por las vacunas. Pero no es así. Durará el tiempo que nosotros como seres humanos decidamos lo que tenga que durar.