¿Rectorados de 6 años?
Desde la semana pasada se está haciendo una encuesta entre alumnos y profesores de la Universidad Autónoma del Estado de México para conocer su opinión acerca de un proyecto de reformas a la ley de la institución, que ha estado vigente desde 1992, pero que en su primera versión fue aprobada en 1956.
La iniciativa propone varios cambios, entre ellos el de alargar de cuatro a seis años la gestión del rector y de los directores de escuelas y facultades.
Hasta hoy, todos los exrectores entrevistados sobre el tema han opinado, basados en su experiencia, que la reforma es conveniente, debido a que cuatro años es poco tiempo para culminar una etapa importante del plan de desarrollo institucional.
La experiencia de la institución puede ser también tomada en cuenta a partir de una historia que acaba de cumplir 190 años:
En el Instituto Literario, los rectores o directores eran designados por el gobernador del estado para cubrir períodos que oscilaban en los tres años, pero que podía excederlos sin límite de tiempo.
El poeta José María Heredia estuvo al frente del Instituto un año escaso, aunque recibió dos nombramientos −primero de director y después de rector− firmados por el gobernador Manuel Díez de Bonilla. Don Felipe Sánchez Solís, el director más prestigiado, ocupó el cargo en dos administraciones no consecutivas, pero el director que duró más tiempo en el puesto fue el doctor Juan Rodríguez, de 1899 a 1909 y el que menos fue el licenciado Gabriel L. Ezeta, del 8 al 16 de febrero de 1943.
Al transformarse el Instituto en Universidad, la ley previó que el rector duraría en el cargo tres años y podría ser reelecto una sola vez. El doctor Juan Josafat Pichardo, primer rector, hizo uso de este derecho y estuvo al frente de la UAEM de 1956 a 1962.
Los siguientes cuatro rectores tuvieron períodos diversos, pues el doctor Mario C. Olivera fungió sólo dos años; el doctor Jorge Hernández García, cinco años y seis meses; el doctor Guillermo Ortiz Garduño, cuatro años y el químico Jesús Barrera Legorreta, tres años y dos meses.
El segundo trienio del ingeniero Barrera se vio interrumpido en 1976 por un movimiento estudiantil que demandó y obtuvo varias reformas, entre ellas la no reelección del rector y los directores. Se alargó entonces el período de tres a cuatro años, sin reelección. Más tarde, durante la administración del rector Rafael López Castañares (2001-2005) surgió la inquietud de ampliar el período a cinco años, pero no fue sometida a consenso.
En estos días, los universitarios decidirán si a partir de 2021 eligen rectores para seis años, mismo tiempo que sumó en el cargo el doctor Juan Josafat Pichardo.
