/ miércoles 4 de noviembre de 2020

Rescate Tierra | Camino sin retorno

La humanidad ha emprendido un camino sin retorno. Trump y Biden, se enfrentan para dirigir una de la naciones más poderosas del planeta. Una Nación con la que compartimos miles de kilómetros de frontera. Somos socios comerciales, su participación en la economía mexicana es muy importante. Dicen que hay más de 20 millones de mexicanos viviendo del otro lado y algunos actualmente, huyen para allá, ante las medidas económicas, políticas y sociales, que comienzan a aplicarse en el país. No hay certeza para los inversionistas nacionales y tampoco para los extranjeros. La inseguridad crece, la salud decrece y el empleo se esfuma.

Gran parte de lo que ocurre, durante el último año, fue acelerado por la pandemia. El sistema de salud, el educativo, el medio ambiente, la seguridad, el empleo, todo fue lastimado por la crisis sanitaria mundial y las instituciones, no pasaron la prueba.

Hoy tenemos países que regresan al confinamiento ante un repunte del número de casos de COVID-19 por la temporada de invierno. Procuran no detener su economía, como se hizo en el primer semestre, otro frenón financiero, obligaría a replantear el modelo económico y los sistemas de producción. El precio de los productos que ha quedado muy por arriba del ingreso y la capacidad de compra.

El próximo año, igual que en Estados Unidos, tendremos elecciones intermedias. El Presidente hace maromas, para que su partido no siga en descenso, necesita la mayoría en la Cámara de Diputados y Senadores para consolidar las reformas que ha emprendido. Aplicar el mismo método que uso, para presionar al INE y al TRIFE, en los últimos meses, solo le restaría legitimidad y hegemonía, orillando al país a una conflictividad social, no deseada.

Golpear al oponente, para obligarlo a defenderse y después acusarlo de violento, para justificar el uso de la fuerza, no parece una estrategia deseada por 120 millones de mexicanos.

Hasta 1928, México, igual que el mundo, vivió una intensa belicosidad. Nos invadieron franceses, estadunidenses, nos peleamos entre nosotros, por la Reforma, por la Cristiada, por la Revolución. Nos tocó ver la Primera y Segunda Guerras Mundiales y saber de los millones de hombres y mujeres que murieron en ellas, mientras México, veía pelear a sus caudillos por el poder.

No queremos violencia. Deseamos oportunidades y respeto para todos. Salario digno. Empleo justo. Jornadas de 8 horas. Un eficaz sistema de salud. Empresas fuertes y competitivas. Ecosistemas sanos. Educación justa. Respeto a los acuerdos globales contra el calentamiento de la Tierra. Diálogo y negociación, antes que imposición y guerra.

Acabar con la corrupción requiere educación y oportunidades. Instruir a la Nación, para que por la vía legal construya y obtenga beneficios para sus familias. De nada sirve pedir a los ciudadanos que sean honestos, si para algunos trámites hay mochada.

Nuestro sistema bancario, resistió el proceso de la pandemia. Bancomer, Banamex, Banorte, y otras instituciones financieras, apoyaron a los ciudadanos ante la crisis económica provocada por el Coronavirus. Hoy tenemos que seguir trabajando en equipo, sociedad, gobierno, empresarios, eliminando los conflictos, transparentando las acciones, haciendo gobierno abierto, escuchando, ayudando y respetando, a todos los actores sociales y esos actores, comportándose en paz.



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La humanidad ha emprendido un camino sin retorno. Trump y Biden, se enfrentan para dirigir una de la naciones más poderosas del planeta. Una Nación con la que compartimos miles de kilómetros de frontera. Somos socios comerciales, su participación en la economía mexicana es muy importante. Dicen que hay más de 20 millones de mexicanos viviendo del otro lado y algunos actualmente, huyen para allá, ante las medidas económicas, políticas y sociales, que comienzan a aplicarse en el país. No hay certeza para los inversionistas nacionales y tampoco para los extranjeros. La inseguridad crece, la salud decrece y el empleo se esfuma.

Gran parte de lo que ocurre, durante el último año, fue acelerado por la pandemia. El sistema de salud, el educativo, el medio ambiente, la seguridad, el empleo, todo fue lastimado por la crisis sanitaria mundial y las instituciones, no pasaron la prueba.

Hoy tenemos países que regresan al confinamiento ante un repunte del número de casos de COVID-19 por la temporada de invierno. Procuran no detener su economía, como se hizo en el primer semestre, otro frenón financiero, obligaría a replantear el modelo económico y los sistemas de producción. El precio de los productos que ha quedado muy por arriba del ingreso y la capacidad de compra.

El próximo año, igual que en Estados Unidos, tendremos elecciones intermedias. El Presidente hace maromas, para que su partido no siga en descenso, necesita la mayoría en la Cámara de Diputados y Senadores para consolidar las reformas que ha emprendido. Aplicar el mismo método que uso, para presionar al INE y al TRIFE, en los últimos meses, solo le restaría legitimidad y hegemonía, orillando al país a una conflictividad social, no deseada.

Golpear al oponente, para obligarlo a defenderse y después acusarlo de violento, para justificar el uso de la fuerza, no parece una estrategia deseada por 120 millones de mexicanos.

Hasta 1928, México, igual que el mundo, vivió una intensa belicosidad. Nos invadieron franceses, estadunidenses, nos peleamos entre nosotros, por la Reforma, por la Cristiada, por la Revolución. Nos tocó ver la Primera y Segunda Guerras Mundiales y saber de los millones de hombres y mujeres que murieron en ellas, mientras México, veía pelear a sus caudillos por el poder.

No queremos violencia. Deseamos oportunidades y respeto para todos. Salario digno. Empleo justo. Jornadas de 8 horas. Un eficaz sistema de salud. Empresas fuertes y competitivas. Ecosistemas sanos. Educación justa. Respeto a los acuerdos globales contra el calentamiento de la Tierra. Diálogo y negociación, antes que imposición y guerra.

Acabar con la corrupción requiere educación y oportunidades. Instruir a la Nación, para que por la vía legal construya y obtenga beneficios para sus familias. De nada sirve pedir a los ciudadanos que sean honestos, si para algunos trámites hay mochada.

Nuestro sistema bancario, resistió el proceso de la pandemia. Bancomer, Banamex, Banorte, y otras instituciones financieras, apoyaron a los ciudadanos ante la crisis económica provocada por el Coronavirus. Hoy tenemos que seguir trabajando en equipo, sociedad, gobierno, empresarios, eliminando los conflictos, transparentando las acciones, haciendo gobierno abierto, escuchando, ayudando y respetando, a todos los actores sociales y esos actores, comportándose en paz.



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