/ martes 13 de julio de 2021

Rescate Tierra | Mentiras verdaderas

A los hombres les gustan las mentiras. Gustan de ser engañados, creyendo las mentiras ajenas y difundiendo las propias. Justifican la mentira calificándolas de piadosas y no piadosas, pequeñas y grandes, necesarias o injustificables.

Condenamos a quien, en primera persona, nos miente y perdonamos al que, en tercera persona, miente.

No hablarás contra tu prójimo falso testimonio, es un mandamiento. El código Hammurabi, condena al mentiroso y condena a quien habla falsamente de otra persona. Mentir en trámites en Estados Unidos, es causa de ser rechazado. En México, parece sinónimo de éxito. Mienten los gobernantes, engañan con promesas que no cumplirán, proponen planes de trabajo y políticas públicas que aplican contra sus dichos. No subirá el precio del gas, y sube. No subirá la luz, y sube. No militarizaré al país y se militariza. Mienten los hijos, los mercaderes, los estudiantes, profesores, obreros, patrones, novios, esposos… La mayoría miente.

Como pedir que la corrupción y la mentira terminen en México, si los principales líderes han hecho de la mentira y la corrupción su forma de vida.

Veo en las calles mexicanos sin trabajo que viven de la caridad pública. Familias que por la crisis económica y la pandemia no pagan luz, predial, agua, y los supuestos apoyos para la crisis, no les llegan. De que sirven las nuevas becas que entregan a jóvenes que ni estudian, ni trabajan. Los árboles que no plantados, pero si declarados. El cuidado ambiental simulado, que no apoya contra el calentamiento global. Los precios de alimentos que van en ascenso. Las medicinas que declaran, pero no existen, los niños con cáncer, mueren y los niños sin cáncer, también.

Todo mentiroso, necesita argumentar sus mentiras. Demostrar que sus dichos son reales y normalmente vive acompañado de otros mentirosos, personas que ven la mentira como algo natural y que sólo la aceptan, cuando son descubiertos.

Todos hemos sido víctimas de un mentiroso, alguien que dice que hará algo, que no hace o nos vende algo que no sirve. En ocasiones, todo termina al ser descubiertos, en otras, hay consecuencias. Quienes administraron agua, en lugar de medicamentos contra las enfermedades, provocaron muertes. Los enfermeros que guardaron dosis de vacunas no aplicadas, son responsables de muertos. Las fuerzas de seguridad que dejaron escapar delincuentes, son culpables de muertos. Quienes encarecen los precios de alimentos y productos básicos, son responsables del hambre y la muerte que amenaza a miles de mexicanos. Las mentiras con las que han destruido bosques, dañado tierras cultivables, perjudicado zonas de reserva de vida, dañado el cultivo de la miel, destruido el prestigio de una persona, los hace responsables de muertes.

De adolescente, mi padre tenía una regla: Si te equivocaste, dime la verdad y corrige el camino, pero si mientes, te engañaras a ti, ya no confiaré en tus dichos y al descubrirte, te sancionaré.

Decir la verdad y conocerla, libera. Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. El mentiroso, siempre es esclavo de sus dichos y perjudica al mundo.

Ojalá pronto termine esta justificación infinita y podamos contribuir todos, para hacer de México, un mejor lugar donde vivir.

A los hombres les gustan las mentiras. Gustan de ser engañados, creyendo las mentiras ajenas y difundiendo las propias. Justifican la mentira calificándolas de piadosas y no piadosas, pequeñas y grandes, necesarias o injustificables.

Condenamos a quien, en primera persona, nos miente y perdonamos al que, en tercera persona, miente.

No hablarás contra tu prójimo falso testimonio, es un mandamiento. El código Hammurabi, condena al mentiroso y condena a quien habla falsamente de otra persona. Mentir en trámites en Estados Unidos, es causa de ser rechazado. En México, parece sinónimo de éxito. Mienten los gobernantes, engañan con promesas que no cumplirán, proponen planes de trabajo y políticas públicas que aplican contra sus dichos. No subirá el precio del gas, y sube. No subirá la luz, y sube. No militarizaré al país y se militariza. Mienten los hijos, los mercaderes, los estudiantes, profesores, obreros, patrones, novios, esposos… La mayoría miente.

Como pedir que la corrupción y la mentira terminen en México, si los principales líderes han hecho de la mentira y la corrupción su forma de vida.

Veo en las calles mexicanos sin trabajo que viven de la caridad pública. Familias que por la crisis económica y la pandemia no pagan luz, predial, agua, y los supuestos apoyos para la crisis, no les llegan. De que sirven las nuevas becas que entregan a jóvenes que ni estudian, ni trabajan. Los árboles que no plantados, pero si declarados. El cuidado ambiental simulado, que no apoya contra el calentamiento global. Los precios de alimentos que van en ascenso. Las medicinas que declaran, pero no existen, los niños con cáncer, mueren y los niños sin cáncer, también.

Todo mentiroso, necesita argumentar sus mentiras. Demostrar que sus dichos son reales y normalmente vive acompañado de otros mentirosos, personas que ven la mentira como algo natural y que sólo la aceptan, cuando son descubiertos.

Todos hemos sido víctimas de un mentiroso, alguien que dice que hará algo, que no hace o nos vende algo que no sirve. En ocasiones, todo termina al ser descubiertos, en otras, hay consecuencias. Quienes administraron agua, en lugar de medicamentos contra las enfermedades, provocaron muertes. Los enfermeros que guardaron dosis de vacunas no aplicadas, son responsables de muertos. Las fuerzas de seguridad que dejaron escapar delincuentes, son culpables de muertos. Quienes encarecen los precios de alimentos y productos básicos, son responsables del hambre y la muerte que amenaza a miles de mexicanos. Las mentiras con las que han destruido bosques, dañado tierras cultivables, perjudicado zonas de reserva de vida, dañado el cultivo de la miel, destruido el prestigio de una persona, los hace responsables de muertes.

De adolescente, mi padre tenía una regla: Si te equivocaste, dime la verdad y corrige el camino, pero si mientes, te engañaras a ti, ya no confiaré en tus dichos y al descubrirte, te sancionaré.

Decir la verdad y conocerla, libera. Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres. El mentiroso, siempre es esclavo de sus dichos y perjudica al mundo.

Ojalá pronto termine esta justificación infinita y podamos contribuir todos, para hacer de México, un mejor lugar donde vivir.