La pandemia va concluir. Después de más de 6 meses de haber iniciado en Wuhan, China. Infectado a gran proporción de la población mundial y matar miles de personas, el virus quedará latente, los seres humanos habremos generado resistencia al patógeno y su letalidad reducirá.
No es la primer epidemia que ataca al mundo, “la peste antonina en los primeros 200 años de esta época mato 5 millones de personas. La plaga de Justiniano, unos 25 millones de personas y la peste negra entre 1346 y 1352, cerca de 100 millones de personas”.
Las proyecciones al inicio de la pandemia, calcularon que afectaría al 90 por ciento de la población mundial, entre 80 y 90 por ciento de los infectados, tendrían una manifestación leve de la enfermedad 10 por ciento graves y 10 por ciento de ellos críticos.
La reacción sanitaria ha sido rápida, los gobiernos a su ritmo, han logrado reducir la mortandad y los efectos de una diseminación no controlada. De haberse cumplido la prospectiva realizada al inicio de la enfermedad de 7 mil 500 millones de personas del planeta podría haber más de 1 mil millones de muertos, pero el número es significativamente más bajo.
El manejo de la comunicación y la información en la pandemia parece muy manipulado. Comentando con amigos médicos, mencionaron que en Tijuana, había rumores de que los enfermos estaban siendo trasladados a la zona militar, para no hacerlos visibles en la ciudad y atenderlos. En la ciudad de México, hay doctores que han sido presionados para reducir las cifras de decesos e infectados y lo han manifestado en las redes. Quienes saben del tema, comentan que es para no provocar temor en la población y tener un control social adecuado en la emergencia.
En lo económico, el mundo ha cambiado. Los pobres se han vuelto miserables y la clase media se ha empobrecido. No hay trabajo, muchas personas se han quedado sin empleo, empresas y comercios no esenciales tienen grandes pérdidas y pocas ventas. Las deudas bancarias de tarjetahabientes es enorme y no es sólo con el sistema bancario nacional, las tarjetas funcionan en esquemas internacionales por los sistemas, carnet, mastercard o visa que las hace válidas en todo el mundo. Los bancos del país son pocos, unos vienen de España, otros de Estados Unidos, y otros de sistemas bancarios europeos. Es necesario llegar a un acuerdo mundial que congele intereses, contenga el crecimiento de la deuda en capital, fomente el ahorro y la reactivación económica. Sin empleo, no habrá reactivación, no habrá ventas, ni trabajo, ni funcionamiento óptimo de comercios y empresas. En México, hubo una época de pactos económicos que congelaba los precios de los productos básicos. Hoy vemos el incremento de varios precios, poco control y poco ingreso de dinero. Bill Gates, Slim y algunos otros millonarios, saben que es necesario un pacto mundial que reactive la economía global. Creo una solución sería borrón y cuenta nueva para volver a generar ingresos y gasto.
Mi reconocimiento a todos los involucrados en la solución de la pandemia, Médicos, enfermeras y personal sanitario, consejeros espirituales que han estado en contacto con almas en pena, para consolarlas y fortalecerlas, autoridades que tomaron decisiones no populares, para reducir riesgos de contagio y consecuencias.
