/ martes 12 de octubre de 2021

Rescate Tierra | ¿Quién no recuerda su historia, está condenado a repetirla? 

Esta paráfrasis, es atribuida a demasiados personajes, desde Confucio a Napoleón y no hablo del cantante mexicano, sino del conquistador Napoleón Bonaparte.

En México escuchamos con frecuencia la oración y a pesar de ello, parece que vivimos en un circulo vicioso, donde cambiamos oro por espejitos y nos rendimos a la voluntad del Gran Tlatoani, sometiéndonos a sus órdenes y deseos, aunque eso nos haga daño. Usamos la historia para juzgar, pero no para planear el futuro, inmersos en el rencor y la venganza. Una cultura del revanchismo, que no sirve para aprender de los errores.

El 12 de octubre se cumplirá 1 año mas del recuerdo de la llegada de Colón a América, Día de la Raza, Día de la Hispanidad, “Día de la Nación Pluricultural” desde 2020 de acuerdo a la declaración del Senado y “Día de la Resistencia Indígena” para algunos de los pueblos indígenas u originarios.

Lo curioso es que todos tienen razón, para unos fue redescubierta América con Colón. Para los otros, México esta constituido por la mezcla de todos los grupos indígenas, incluyendo las más de 56 etnias que aun quedan y españoles, franceses, británicos, italianos, germanos, chinos, estadounidenses, africanos o portugueses. Y para los últimos, es el día en que los aztecas expulsaron a los españoles invasores, resistiendo el asedio a México Tenochtitlán antes de que volvieran a arremeter contra los aztecas, apoyados por los pueblos que habitaban el centro del país, cansados del dominio Mexica. Totonacas, Tlaxcaltecas y Cholultecas. Una alianza militar, muy al estilo de las alianzas políticas realizadas actualmente, con resultados adversos. Los aliados, terminaron siendo siervos de los conquistadores y el resultado de su enojo, fue diferente al esperado. Hoy, más de 500 años después, los pueblos originarios de México, aun esperan ser tratados con dignidad y oportunidades para ellos y sus comunidades.

Siglos después, tuvimos a Juárez, un presidente de notable inteligencia, sangre indígena y capacidad de gobierno, un visionario. Le siguió Porfirio Díaz, también con sangre indígena. En sus años de gobierno, modernizó a México, comenzó su electrificación, los comunicó a través del ferrocarril y dejó que la acordada secuestrara gente en la ciudad de México, para mandarla a trabajar a los campos henequeneros, de Pinotepa Nacional, como esclavos disfrazados. De Porfirio, vino Madero, Carranza, Zapata, Villa y una Revolución donde figuraron campesinos y obreros, unos luchaban por la tierra, otros por los derechos obreros. Ambos grupos hoy sufren los excesos de los herederos de sus líderes, la “Tierra no es de quien la trabaja” y la jornada laboral, derechos y salario de los trabajadores han sido mermados por los acuerdos de los gobernantes en turno. En el segundo tercio, del pasado siglo, se intentó generar una identidad nacional, donde coincidieran todos los méxicos, el obrero, campesino, empresarial, los sectores público y privado, con grandes etapas de progreso y retroceso. Un País, que parece perder, los beneficios firmados hace 100 años, porqué no recuerda su historia y el odio a nublado la claridad de sus decisiones.


Esta paráfrasis, es atribuida a demasiados personajes, desde Confucio a Napoleón y no hablo del cantante mexicano, sino del conquistador Napoleón Bonaparte.

En México escuchamos con frecuencia la oración y a pesar de ello, parece que vivimos en un circulo vicioso, donde cambiamos oro por espejitos y nos rendimos a la voluntad del Gran Tlatoani, sometiéndonos a sus órdenes y deseos, aunque eso nos haga daño. Usamos la historia para juzgar, pero no para planear el futuro, inmersos en el rencor y la venganza. Una cultura del revanchismo, que no sirve para aprender de los errores.

El 12 de octubre se cumplirá 1 año mas del recuerdo de la llegada de Colón a América, Día de la Raza, Día de la Hispanidad, “Día de la Nación Pluricultural” desde 2020 de acuerdo a la declaración del Senado y “Día de la Resistencia Indígena” para algunos de los pueblos indígenas u originarios.

Lo curioso es que todos tienen razón, para unos fue redescubierta América con Colón. Para los otros, México esta constituido por la mezcla de todos los grupos indígenas, incluyendo las más de 56 etnias que aun quedan y españoles, franceses, británicos, italianos, germanos, chinos, estadounidenses, africanos o portugueses. Y para los últimos, es el día en que los aztecas expulsaron a los españoles invasores, resistiendo el asedio a México Tenochtitlán antes de que volvieran a arremeter contra los aztecas, apoyados por los pueblos que habitaban el centro del país, cansados del dominio Mexica. Totonacas, Tlaxcaltecas y Cholultecas. Una alianza militar, muy al estilo de las alianzas políticas realizadas actualmente, con resultados adversos. Los aliados, terminaron siendo siervos de los conquistadores y el resultado de su enojo, fue diferente al esperado. Hoy, más de 500 años después, los pueblos originarios de México, aun esperan ser tratados con dignidad y oportunidades para ellos y sus comunidades.

Siglos después, tuvimos a Juárez, un presidente de notable inteligencia, sangre indígena y capacidad de gobierno, un visionario. Le siguió Porfirio Díaz, también con sangre indígena. En sus años de gobierno, modernizó a México, comenzó su electrificación, los comunicó a través del ferrocarril y dejó que la acordada secuestrara gente en la ciudad de México, para mandarla a trabajar a los campos henequeneros, de Pinotepa Nacional, como esclavos disfrazados. De Porfirio, vino Madero, Carranza, Zapata, Villa y una Revolución donde figuraron campesinos y obreros, unos luchaban por la tierra, otros por los derechos obreros. Ambos grupos hoy sufren los excesos de los herederos de sus líderes, la “Tierra no es de quien la trabaja” y la jornada laboral, derechos y salario de los trabajadores han sido mermados por los acuerdos de los gobernantes en turno. En el segundo tercio, del pasado siglo, se intentó generar una identidad nacional, donde coincidieran todos los méxicos, el obrero, campesino, empresarial, los sectores público y privado, con grandes etapas de progreso y retroceso. Un País, que parece perder, los beneficios firmados hace 100 años, porqué no recuerda su historia y el odio a nublado la claridad de sus decisiones.