/ miércoles 27 de junio de 2018

Subrayando


¿Voto razonado o influenciado?

Es una decisión personal a la hora de emitir el voto, la de expresar la voluntad en libertad y en la soledad de la casilla electoral. Y justamente 3 días antes de la elección la ley ordena terminar campañas políticas y prohíbe hacer proselitismo a partidos y candidatos. Época de silencio para dar oportunidad al electorado a reflexionar su voto.

Días para razonar el voto, analizando propuestas, viabilidad de las mismas, conocer más sobre cada candidato, ¿quién es?, ¿qué resultados ha presentado en las diferentes oportunidades de servicio que ha tenido?, ¿cuál es la autoridad moral para poder generar confianza en sus palabras?

Porque el país en donde vivimos y vamos a votar nos da la oportunidad, democráticamente de razonar y emitir libremente el voto, igualando esta acción a todos los mexicanos ricos y pobres, jóvenes y viejos, mujeres y hombres, todos por igual, y nuestra voluntad expresada vale lo mismo, cuenta lo mismo un solo voto de cualquier mexicano, el día de la elección tenemos y gozamos del mismo derecho y obligación como ciudadanos.

Pasó la época de los colores, la música, el ingenio de los millones de spots y propaganda. Pasó la época de las caras sonrientes de los candidatos, de promesas, algunas que hacían sentir como retrasados, por ingenuas y tontas, otras que tenían todo el tinte de la mentira, la imposibilidad de ejecutarse, otras que como varita mágica iban a acabar con todos los grandes problemas sociales. Pasó la época de la ilusión y del sueño envuelto en la magia de las campañas.

Pasó la época de hacer creer que el número de personas asistentes a un mitin multitudinario se iba a convertir en votos, pasó la época de hacer pensar que todo va a cambiar para bien, sólo porque lo dice un candidato, pasó la época no sólo del engaño de algunos candidatos, sino del engaño y simulación del ciudadano que promete votar por el que le dé mayores recursos en campaña o el día de la elección.

Pasó la época de la simulación de trabajo proselitista en campaña de algunos militantes de cualquier partido, pasó la época del poder de las encuestas que adormecían la razón.

Ya pasaron esos días, ahora es la hora de la verdad, del respeto al voto, sea cual sea la decisión que muestre el voto razonado, no sólo influenciado por el espejismo de las campañas y las encuestas, es hora de avanzar, de mostrar mujeres y hombres maduros, serios y responsables que conforman un gran país y que tienen un gran compromiso para desarrollarlo unidos.

Voto que va a definir y a trazar los próximos días y años de cada ciudadano.


¿Voto razonado o influenciado?

Es una decisión personal a la hora de emitir el voto, la de expresar la voluntad en libertad y en la soledad de la casilla electoral. Y justamente 3 días antes de la elección la ley ordena terminar campañas políticas y prohíbe hacer proselitismo a partidos y candidatos. Época de silencio para dar oportunidad al electorado a reflexionar su voto.

Días para razonar el voto, analizando propuestas, viabilidad de las mismas, conocer más sobre cada candidato, ¿quién es?, ¿qué resultados ha presentado en las diferentes oportunidades de servicio que ha tenido?, ¿cuál es la autoridad moral para poder generar confianza en sus palabras?

Porque el país en donde vivimos y vamos a votar nos da la oportunidad, democráticamente de razonar y emitir libremente el voto, igualando esta acción a todos los mexicanos ricos y pobres, jóvenes y viejos, mujeres y hombres, todos por igual, y nuestra voluntad expresada vale lo mismo, cuenta lo mismo un solo voto de cualquier mexicano, el día de la elección tenemos y gozamos del mismo derecho y obligación como ciudadanos.

Pasó la época de los colores, la música, el ingenio de los millones de spots y propaganda. Pasó la época de las caras sonrientes de los candidatos, de promesas, algunas que hacían sentir como retrasados, por ingenuas y tontas, otras que tenían todo el tinte de la mentira, la imposibilidad de ejecutarse, otras que como varita mágica iban a acabar con todos los grandes problemas sociales. Pasó la época de la ilusión y del sueño envuelto en la magia de las campañas.

Pasó la época de hacer creer que el número de personas asistentes a un mitin multitudinario se iba a convertir en votos, pasó la época de hacer pensar que todo va a cambiar para bien, sólo porque lo dice un candidato, pasó la época no sólo del engaño de algunos candidatos, sino del engaño y simulación del ciudadano que promete votar por el que le dé mayores recursos en campaña o el día de la elección.

Pasó la época de la simulación de trabajo proselitista en campaña de algunos militantes de cualquier partido, pasó la época del poder de las encuestas que adormecían la razón.

Ya pasaron esos días, ahora es la hora de la verdad, del respeto al voto, sea cual sea la decisión que muestre el voto razonado, no sólo influenciado por el espejismo de las campañas y las encuestas, es hora de avanzar, de mostrar mujeres y hombres maduros, serios y responsables que conforman un gran país y que tienen un gran compromiso para desarrollarlo unidos.

Voto que va a definir y a trazar los próximos días y años de cada ciudadano.