Comparecencias, oportunidad para diputados, funcionarios y ciudadanos
Las comparecencias en la Cámara de Diputados son la oportunidad de preguntar a los funcionarios de primer nivel, (a los que están cerca del gobernador, a los Integrantes del gabinete), acerca del estado que guarda su trabajo en el área correspondiente. Las comparecencias se presentan después de que el Ejecutivo entrega o presenta a la Legislatura su informe anual del estado de la administración, presupuesto y las finanzas del Estado.
La Legislatura llama a los secretarios responsables de las diferentes áreas del gobierno para que respondan ¿qué hicieron?, ¿por qué lo hicieron?, ¿en qué beneficiaron a la mayoría?, si gastaron lo que les asignaron, ¿en dónde están los resultados?, entre otros.
Los diputados, sobre todo los presidentes de las respectivas Comisiones Legislativas deben estar bien informados sobre lo que van a preguntar y recoger de los ciudadanos las dudas, las opiniones, tener el balance social, “la calificación” que la sociedad está dando porque siente el beneficio o el daño.
Los funcionarios al comparecer ante los diputados tienen que demostrar no sólo en cifras los resultados de su trabajo anual, porque en la comparecencia cuenta todo. La presencia física adecuada que denote seriedad, respeto, higiene. La actitud ante las preguntas, si está poniendo atención o no, si está distraído, si sólo está viendo los papeles que como “acordeón” le hicieron sus colaboradores, si al buscar y buscar la respuesta se le caen los papeles, si sólo atiende al desorden de éstos.
Y luego, cuál es su actitud ante el micrófono: Soberbia, con aires de superioridad o de respeto. La voz es importante, la seguridad en lo que dice, porque lo sabe y está convencido, o duda, tartamudea, se equivoca de fechas, lugar, nombre del diputado, nombre del municipio o lugar en caso de mencionarlo. O en lugar de contestar, “hecha rollo” que no viene al caso.
Las comparecencias de funcionarios en la Cámara de Diputados son oportunidades, no sólo para demostrar interés, conocimiento, estudio, respeto de los funcionarios y de los diputados, sino también deben interesar a los ciudadanos, que atentos a fechas y tiempos en el año, pueden y deben participar previamente, hablando con los diputados para transmitirles sus inquietudes, quejas con pruebas y sobre todo sus propuestas para mejorar el estado de la administración pública y la vida diaria.
