La aplicación de la ley y la corrupción
México es un país que tiene leyes establecidas por el poder Legislativo atendiendo a la voluntad de los ciudadanos, y a las que se deben someter para evitar conflictos y vivir en armonía.
El espíritu de la ley, expresado en la exposición de motivos, de cada ley, con claridad debe en su caso manifestar el propósito, los posibles resultados de beneficio a la generalidad de los mexicanos y debe presentar argumentos, imparciales, viables, que convenzan al legislador para poder aprobar la ley.
El ciudadano se pregunta ¿si tenemos leyes, por qué no se cumplen?, por qué siempre hay pretextos, a pesar de que eso genera mayor violencia, mayor desconfianza, mayor descomposición del tejido social, mayor número de delitos.
No acatar la ley se considera en la mayoría de los casos un delito, No aplicarla es corrupción.
Aplicar la ley, respetando al ciudadano, respetando los derechos humanos, es obligación de la autoridad, para eso está, esa es su tarea principal, asegurar la paz y garantizar la justicia y seguridad individual y colectiva. Evitar daños a terceros respetando el ejercicio de la libertad de cada quien.
La impunidad es corrupción, porque la omisión en la aplicación de la ley, siempre esconde algún interés personal o de grupo.
El mayor daño que está sufriendo la sociedad mexicana es precisamente la impunidad, el no aplicar la ley justamente, Esa omisión ha dejado crecer la confianza, pero de los delincuentes “Al fin nadie los va a tocar,” Al fin no se va aplicar ninguna ley”.
Mientras no se respete al ciudadano, su libertad, su seguridad, mientras se interpreten las leyes a voluntad del juzgador por intereses creados. Seguirá creciendo la impunidad, los delitos seguirán haciendo mucho daño y México no vivirá con la paz necesaria para crecer sanamente.
Coordinadora Estatal de Lactancia Materna y Bancos de Leche
Química Fármaco Bióloga
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