Las cabañuelas son un método tradicional de predicción meteorológica sin base científica, es decir, sirven para predecir el clima en los próximos 12 meses del año, observado el comportamiento de las condiciones meteorológicas de los primeros 12 días de enero Los aztecas y los mayas lo utilizaban.
El método de las cabañuelas se basa en la observación de las condiciones atmosféricas a lo largo de los primeros 12 días de enero, los cuales corresponderían a los 12 meses del año. Así, por ejemplo, el clima observado el 2 de enero correspondería a febrero; el 3 de enero, a marzo; el4 de enero, abril, y así sucesivamente, hasta llegar al día 12, el cual correspondería a diciembre. En la actualidad el cambio climático producido a través de los años, no permite la precisión del pronóstico de las cabañuelas, como en la antigüedad.
En la política, tampoco se puede predecir el clima político, pues las condiciones cambian cada día, cada época electoral principalmente, sin embargo, observando los comportamientos políticos, más o menos nos permiten predecir el clima político.
Por ejemplo, el calendario electoral nos da la predicción de que, en enero: el clima político es templado, de concertaciones, de alianzas. En febrero: va a ser, de viento y polvaredas, ya que se inician las precampañas y las giras son recorriendo caminos polvorientos.
El marzo, abril y mayo: el clima va a ser caluroso, con temperaturas frías en la sombra (de” los cuartos de guerra” de campañas) y el sol quema al aire libre, cuando los candidatos libremente se “adornan” y “queman”, a sus contrincantes.
En junio: vientos huracanados, incendios, hasta puede haber granizo, que golpee duro.
En Julio: derrumbes, que parten cerros y caminos construidos, caídas de piedras y tierra, que obstaculizaran avances de pueblos y ciudades.
Y así, cada día, cada acontecimiento político nos permite pronosticar el clima político que se avecina.
