/ lunes 14 de mayo de 2018

#TodoComunica

A pesar de los avances que se han alcanzado en América Latina y El Caribe para reducir la pobreza, sigue siendo la región más desigual del mundo, de acuerdo con el reporte del Fondo Monetario Internacional (FMI) Perspectivas Económicas: Las Américas, y en el caso de México, la incertidumbre política podría descarrillar esa recuperación.

Adicionalmente, los riesgos económicos del exterior, a partir del establecimiento de políticas más proteccionistas y el endurecimiento de las condiciones financieras mundiales, podrían complicar más las perspectivas de crecimiento, que para este año se estimaron en 2 por ciento.

Uno de los aspectos en los cuales deberían centrarse las reformas y políticas públicas de la región, es “invertir más en la gente, mediante un gasto más eficiente en educación”. Y este punto en particular cobra relevancia al conmemorar el Día del Maestro.

De acuerdo con la organización “Mexicanos primero”, el reporte ¿Progreso Equitativo? Movilidad económica entre generaciones del mundo –elaborado por el Banco Mundial (BM)- advierte que durante los últimos 30 años, a los hijos de las familias más pobres les ha costado más subir en la escala económica, debido a la desigualdad de oportunidades.

La posibilidad de que las personas que han nacido en hogares pobres mejoren su situación, se reduce. En muchas economías los niveles de vida promedio son aún más bajos, en comparación con economías de altos ingresos, refiere información de “El Universal”.

El BM enfatiza la urgencia de invertir en los niños desde temprana edad para que tengan buena alimentación y reciban buena educación, además de que deben crearse –insiste el organismo internacional- comunidades seguras donde los infantes puedan crecer, aprender y prosperar. El círculo de la pobreza se prolonga hasta 20 años si no se generan condiciones favorables que permitan oportunidades para las llamadas “nuevas generaciones”.

El problema en México no es la pobreza, sino la desigualdad. Ahora en medio de las campañas políticas, las agendas de la candidata y los candidatos se enfocan en otros temas más “escandalosos” y no necesariamente en temas medulares, y lo que es peor: la mayoría de los mexicanos no sabemos exactamente cuál será la ruta.

Sin embargo, no podemos dejar de atender los asuntos económicos, porque el FMI indica que en la medida en que se disipe la incertidumbre por el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, las perspectivas de crecimiento podrían mejorar, y luego de conocer el resultado del primero de julio, el Producto Interno Bruto se aceleraría hasta 2.3 por ciento.

Así que lo que urge al país es certidumbre y estabilidad. ¿Hacía allá nos encaminamos? Ya faltan solo 49 días para despejar la incógnita.

A pesar de los avances que se han alcanzado en América Latina y El Caribe para reducir la pobreza, sigue siendo la región más desigual del mundo, de acuerdo con el reporte del Fondo Monetario Internacional (FMI) Perspectivas Económicas: Las Américas, y en el caso de México, la incertidumbre política podría descarrillar esa recuperación.

Adicionalmente, los riesgos económicos del exterior, a partir del establecimiento de políticas más proteccionistas y el endurecimiento de las condiciones financieras mundiales, podrían complicar más las perspectivas de crecimiento, que para este año se estimaron en 2 por ciento.

Uno de los aspectos en los cuales deberían centrarse las reformas y políticas públicas de la región, es “invertir más en la gente, mediante un gasto más eficiente en educación”. Y este punto en particular cobra relevancia al conmemorar el Día del Maestro.

De acuerdo con la organización “Mexicanos primero”, el reporte ¿Progreso Equitativo? Movilidad económica entre generaciones del mundo –elaborado por el Banco Mundial (BM)- advierte que durante los últimos 30 años, a los hijos de las familias más pobres les ha costado más subir en la escala económica, debido a la desigualdad de oportunidades.

La posibilidad de que las personas que han nacido en hogares pobres mejoren su situación, se reduce. En muchas economías los niveles de vida promedio son aún más bajos, en comparación con economías de altos ingresos, refiere información de “El Universal”.

El BM enfatiza la urgencia de invertir en los niños desde temprana edad para que tengan buena alimentación y reciban buena educación, además de que deben crearse –insiste el organismo internacional- comunidades seguras donde los infantes puedan crecer, aprender y prosperar. El círculo de la pobreza se prolonga hasta 20 años si no se generan condiciones favorables que permitan oportunidades para las llamadas “nuevas generaciones”.

El problema en México no es la pobreza, sino la desigualdad. Ahora en medio de las campañas políticas, las agendas de la candidata y los candidatos se enfocan en otros temas más “escandalosos” y no necesariamente en temas medulares, y lo que es peor: la mayoría de los mexicanos no sabemos exactamente cuál será la ruta.

Sin embargo, no podemos dejar de atender los asuntos económicos, porque el FMI indica que en la medida en que se disipe la incertidumbre por el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá, las perspectivas de crecimiento podrían mejorar, y luego de conocer el resultado del primero de julio, el Producto Interno Bruto se aceleraría hasta 2.3 por ciento.

Así que lo que urge al país es certidumbre y estabilidad. ¿Hacía allá nos encaminamos? Ya faltan solo 49 días para despejar la incógnita.