/ lunes 10 de diciembre de 2018

#TodoComunica


División de poderes, ¿freno al abuso?

Ahora sí. La llamada “cuarta transformación” –derivada del cambio de régimen de gobierno- ha traído consigo una “verdadera” división de poderes. Mientras la mayoría del Congreso de la Unión y el Poder Ejecutivo, se mantienen en la misma “línea”, el Poder Judicial de la Federación ha marcado una diferencia.

El pasado fin de semana, el ministro, Alberto Pérez Dayán, decidió la suspensión de la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos, que reglamenta los artículos 75 y 127 de la Constitución Política del país, en respuesta a las acciones de inconstitucionalidad que promovieron -por separado-, la Comisión Nacional de Derechos Humanos y un grupo de senadores opositores a Morena.

Dicha ley sostiene que ningún servidor público obtenga una remuneración por el desempeño de su función o cargo, mayor a la establecida para el presidente de la República, definida en 108 mil pesos mensuales.

Hasta la semana pasada se reportó el trámite de 2 mil 835 amparos contra la citada Ley de Remuneraciones, aprobada en el Congreso de la Unión –bajo el dominio de Morena- en septiembre pasado.

Ahora, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, tiene una batalla en el ámbito judicial. En entrevista con medios periodísticos de Nayarit, calificó como acto de “deshonestidad” la decisión en la Suprema Corte, la cual deberá analizarse en el pleno.

De acuerdo con la Real Academia Española, el adjetivo “deshonesto” se aplica a algo o alguien que se encuentra “no conforme a razón ni a las ideas recibidas por buenas”, y añade que es “grosero, descortés o indecoroso”.

En esa perspectiva, el calificativo de López Obrador hacia la decisión de un ministro es correcta, porque lo hace desde su perspectiva y desde su visión de “buenos contra malos”. Reiteró su planteamiento: “No puede haber gobierno rico y pueblo pobre”.

Pero… pierde de vista que así funciona la separación de poderes y un verdadero ejercicio democrático. La diferencia de opiniones y posturas enriquece el análisis y la toma de decisiones. Aunque no le agrade, solo así podrá haber una real y efectiva división de poderes que evite el abuso… porque ahora puede afectar a unos cuantos, pero el día de mañana podría afectar a todos.

Y hablando de división de poderes, en el Estado de México el Congreso local abrogó la llamada “Ley ISSEMyM”. Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde, dominaron. “Cría cuervos…”


PERCEPCIÓN

Hoy se inaugura un espacio de Mediación Penitenciaria en el Centro de Prevención y Reinserción Social de Chalco, como parte de un programa basado en la “cultura de paz”, que ha dado excelentes resultados. En todo el estado colaboran 500 mediadores penitenciarios, que son personas privadas de su libertad, y más de 100 servidores públicos.


División de poderes, ¿freno al abuso?

Ahora sí. La llamada “cuarta transformación” –derivada del cambio de régimen de gobierno- ha traído consigo una “verdadera” división de poderes. Mientras la mayoría del Congreso de la Unión y el Poder Ejecutivo, se mantienen en la misma “línea”, el Poder Judicial de la Federación ha marcado una diferencia.

El pasado fin de semana, el ministro, Alberto Pérez Dayán, decidió la suspensión de la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos, que reglamenta los artículos 75 y 127 de la Constitución Política del país, en respuesta a las acciones de inconstitucionalidad que promovieron -por separado-, la Comisión Nacional de Derechos Humanos y un grupo de senadores opositores a Morena.

Dicha ley sostiene que ningún servidor público obtenga una remuneración por el desempeño de su función o cargo, mayor a la establecida para el presidente de la República, definida en 108 mil pesos mensuales.

Hasta la semana pasada se reportó el trámite de 2 mil 835 amparos contra la citada Ley de Remuneraciones, aprobada en el Congreso de la Unión –bajo el dominio de Morena- en septiembre pasado.

Ahora, el presidente, Andrés Manuel López Obrador, tiene una batalla en el ámbito judicial. En entrevista con medios periodísticos de Nayarit, calificó como acto de “deshonestidad” la decisión en la Suprema Corte, la cual deberá analizarse en el pleno.

De acuerdo con la Real Academia Española, el adjetivo “deshonesto” se aplica a algo o alguien que se encuentra “no conforme a razón ni a las ideas recibidas por buenas”, y añade que es “grosero, descortés o indecoroso”.

En esa perspectiva, el calificativo de López Obrador hacia la decisión de un ministro es correcta, porque lo hace desde su perspectiva y desde su visión de “buenos contra malos”. Reiteró su planteamiento: “No puede haber gobierno rico y pueblo pobre”.

Pero… pierde de vista que así funciona la separación de poderes y un verdadero ejercicio democrático. La diferencia de opiniones y posturas enriquece el análisis y la toma de decisiones. Aunque no le agrade, solo así podrá haber una real y efectiva división de poderes que evite el abuso… porque ahora puede afectar a unos cuantos, pero el día de mañana podría afectar a todos.

Y hablando de división de poderes, en el Estado de México el Congreso local abrogó la llamada “Ley ISSEMyM”. Morena, Partido del Trabajo y Partido Verde, dominaron. “Cría cuervos…”


PERCEPCIÓN

Hoy se inaugura un espacio de Mediación Penitenciaria en el Centro de Prevención y Reinserción Social de Chalco, como parte de un programa basado en la “cultura de paz”, que ha dado excelentes resultados. En todo el estado colaboran 500 mediadores penitenciarios, que son personas privadas de su libertad, y más de 100 servidores públicos.