/ lunes 22 de julio de 2019

#TodoComunica / Cuatro Ejes


Lograr que el trabajo, los retos y logros de una institución, empresa o figura pública se conozcan entre una comunidad específica o en la sociedad en general, requiere un proceso sistemático, ordenado y estratégico de su comunicación.

Lo más recomendable –antes de iniciar las acciones de comunicación- es investigar al auditorio o al sector de la sociedad de interés, para conocer con mayor precisión a quiénes se les desea enviar los mensajes e identificar características, intereses, valores, expectativas y cualquier otro elemento que permita mejores resultados con las estrategias.

Uno de los problemas más frecuentes que enfrentan las áreas de comunicación –tanto en el sector público como privado- es la “se crecía” con la que las instituciones o empresas guardan información clave, porque imaginan que se podría “filtrar” y ponerles en riesgo. Lamentablemente, cuando la información se conoce afuera de la organización es porque“alguien más” la ha divulgado o se ha obtenido por las vías de transparencia, que en el caso del sector público en México se fortalecieron con la primera Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información de 2002.

El riesgo de mantener “ajenas” alas áreas de comunicación de dinámicas y procesos clave dentro delas organizaciones, y particularmente cuando se enfrentan situaciones de crisis de reputación, es que al no tener los elementos suficientes (datos, información, testimonios, imágenes, audios o videos) para resolver o gestionar el problema, las acciones de comunicación pierden efectividad y la crisis se puede agravar.

Por otra parte, cuando las y los responsables de hacer comunicación se encuentran “aislados” de proyectos, programas o decisiones estratégicas para la institución, empresa o figura pública, difícilmente puede hacerse una planeación adecuada que contribuya a hacer más eficaz y eficiente la percepción positiva entre la sociedad o un sector específico.

Si partimos del principio –que da nombre a este espacio- de que “todo comunica”, también es fundamental que existan mecanismos, canales y estrategias de comunicación interna; de lo contrario los flujos de información pueden complicar la operación cotidiana y eso provoca –al menos- improvisación y disminución de la efectividad.

Por ello, es necesario un Sistema de Comunicación Institucional que se ejecute en cuatro ejes: relaciones públicas, información, campañas y redes socio digitales. En la medida en que esos cuatro componentes se encuentren articulados y operen con equilibro, será posible que la comunicación alcance sus objetivos y se logre el posicionamiento favorable de la institución, empresa o figura pública.


PERCEPCIÓN

Nos reencontramos en este espacio el próximo 5 de agosto.


Lograr que el trabajo, los retos y logros de una institución, empresa o figura pública se conozcan entre una comunidad específica o en la sociedad en general, requiere un proceso sistemático, ordenado y estratégico de su comunicación.

Lo más recomendable –antes de iniciar las acciones de comunicación- es investigar al auditorio o al sector de la sociedad de interés, para conocer con mayor precisión a quiénes se les desea enviar los mensajes e identificar características, intereses, valores, expectativas y cualquier otro elemento que permita mejores resultados con las estrategias.

Uno de los problemas más frecuentes que enfrentan las áreas de comunicación –tanto en el sector público como privado- es la “se crecía” con la que las instituciones o empresas guardan información clave, porque imaginan que se podría “filtrar” y ponerles en riesgo. Lamentablemente, cuando la información se conoce afuera de la organización es porque“alguien más” la ha divulgado o se ha obtenido por las vías de transparencia, que en el caso del sector público en México se fortalecieron con la primera Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información de 2002.

El riesgo de mantener “ajenas” alas áreas de comunicación de dinámicas y procesos clave dentro delas organizaciones, y particularmente cuando se enfrentan situaciones de crisis de reputación, es que al no tener los elementos suficientes (datos, información, testimonios, imágenes, audios o videos) para resolver o gestionar el problema, las acciones de comunicación pierden efectividad y la crisis se puede agravar.

Por otra parte, cuando las y los responsables de hacer comunicación se encuentran “aislados” de proyectos, programas o decisiones estratégicas para la institución, empresa o figura pública, difícilmente puede hacerse una planeación adecuada que contribuya a hacer más eficaz y eficiente la percepción positiva entre la sociedad o un sector específico.

Si partimos del principio –que da nombre a este espacio- de que “todo comunica”, también es fundamental que existan mecanismos, canales y estrategias de comunicación interna; de lo contrario los flujos de información pueden complicar la operación cotidiana y eso provoca –al menos- improvisación y disminución de la efectividad.

Por ello, es necesario un Sistema de Comunicación Institucional que se ejecute en cuatro ejes: relaciones públicas, información, campañas y redes socio digitales. En la medida en que esos cuatro componentes se encuentren articulados y operen con equilibro, será posible que la comunicación alcance sus objetivos y se logre el posicionamiento favorable de la institución, empresa o figura pública.


PERCEPCIÓN

Nos reencontramos en este espacio el próximo 5 de agosto.