/ lunes 27 de enero de 2020

#TodoComunica | Evitemos que la pobreza se herede


“¿Cuántos mexicanos no han alcanzado su potencial? ¿Cuánto talento se está desperdiciando?” son preguntas que plantea el “Informe Movilidad social en México 2019. Hacia la igualdad regional de oportunidades”, elaborado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias, en el que –entre otros aspectos- se advierte la necesidad de fortalecer el Sistema Educativo Nacional.

La movilidad social se refiere a la capacidad y las oportunidades que tiene una persona para ascender en la escala socioeconómica. En el caso de México, el Índice de Movilidad Social 2020 del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) determinó que nuestro país ocupa el lugar 58 de 82 economías analizadas.

Las naciones con mejores oportunidades de movilidad social son Dinamarca (1), Noruega (2) y Finlandia (3). Además, 17 de los 20 lugares con mayor movilidad se localizan en Europa, mientras las últimas posiciones son Costa de Marfil (82), Senegal (81) y Camerún (80), precisa el informe del WEF.

Esto significa, por ejemplo, que una persona en Dinamarca, que nació en condiciones de pobreza, tendrá similares probabilidades de obtener un ingreso alto cuando sea adulto, tanto como las de quien nace en una familia rica.

En el caso de México, el informe del centro Espinosa Yglesias advierte que “al menos 7 de cada 10 mexicanos que nacen en el peldaño más bajo de la escalera socioeconómica del país, no logran superar la condición de pobreza durante su vida (…) la ausencia de un piso parejo de arranque y avance en la vida para todos los mexicanos, hace que, en nuestro país, la pobreza se herede”.

En ese sentido, se plantea la necesidad de que el sistema educativo de México sea incluyente y de calidad, a partir de dos objetivos: universalización y mejora de la calidad del aprendizaje y la pertinencia de la educación en todos los niveles, así como garantizar las oportunidades de las mujeres, los grupos étnicos y las poblaciones en desventaja.

Por ello, entre otras medidas, recomiendan que mejoren las competencias cognitivas y socioemocionales y exista un mecanismo amplio para facilitar que los jóvenes transiten de la escuela hacia el mercado laboral, procurando que concluyan su ciclo educativo.

Es obligado que las instituciones de educación, los gobiernos y la sociedad en su conjunto, fortalezcamos las condiciones en las cuales se ofrece educación y, al mismo tiempo, mejoren las condiciones de trabajo, atención sanitaria, protección social, acceso a la tecnología, salarios justos y oportunidades de empleo… sin distinciones.

PERCEPCIÓN

Terrible que el suicidio de menores de edad en México se haya incrementado en 385 por ciento y lo peor: las madres y los padres de familia no percibimos señales de riesgo. Insistiremos siempre: falta más diálogo, cara a cara.

Facebook: ricardo.joya.94 / Twitter: @RJoyaC / Instagram: joya.ricardo11


“¿Cuántos mexicanos no han alcanzado su potencial? ¿Cuánto talento se está desperdiciando?” son preguntas que plantea el “Informe Movilidad social en México 2019. Hacia la igualdad regional de oportunidades”, elaborado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias, en el que –entre otros aspectos- se advierte la necesidad de fortalecer el Sistema Educativo Nacional.

La movilidad social se refiere a la capacidad y las oportunidades que tiene una persona para ascender en la escala socioeconómica. En el caso de México, el Índice de Movilidad Social 2020 del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) determinó que nuestro país ocupa el lugar 58 de 82 economías analizadas.

Las naciones con mejores oportunidades de movilidad social son Dinamarca (1), Noruega (2) y Finlandia (3). Además, 17 de los 20 lugares con mayor movilidad se localizan en Europa, mientras las últimas posiciones son Costa de Marfil (82), Senegal (81) y Camerún (80), precisa el informe del WEF.

Esto significa, por ejemplo, que una persona en Dinamarca, que nació en condiciones de pobreza, tendrá similares probabilidades de obtener un ingreso alto cuando sea adulto, tanto como las de quien nace en una familia rica.

En el caso de México, el informe del centro Espinosa Yglesias advierte que “al menos 7 de cada 10 mexicanos que nacen en el peldaño más bajo de la escalera socioeconómica del país, no logran superar la condición de pobreza durante su vida (…) la ausencia de un piso parejo de arranque y avance en la vida para todos los mexicanos, hace que, en nuestro país, la pobreza se herede”.

En ese sentido, se plantea la necesidad de que el sistema educativo de México sea incluyente y de calidad, a partir de dos objetivos: universalización y mejora de la calidad del aprendizaje y la pertinencia de la educación en todos los niveles, así como garantizar las oportunidades de las mujeres, los grupos étnicos y las poblaciones en desventaja.

Por ello, entre otras medidas, recomiendan que mejoren las competencias cognitivas y socioemocionales y exista un mecanismo amplio para facilitar que los jóvenes transiten de la escuela hacia el mercado laboral, procurando que concluyan su ciclo educativo.

Es obligado que las instituciones de educación, los gobiernos y la sociedad en su conjunto, fortalezcamos las condiciones en las cuales se ofrece educación y, al mismo tiempo, mejoren las condiciones de trabajo, atención sanitaria, protección social, acceso a la tecnología, salarios justos y oportunidades de empleo… sin distinciones.

PERCEPCIÓN

Terrible que el suicidio de menores de edad en México se haya incrementado en 385 por ciento y lo peor: las madres y los padres de familia no percibimos señales de riesgo. Insistiremos siempre: falta más diálogo, cara a cara.

Facebook: ricardo.joya.94 / Twitter: @RJoyaC / Instagram: joya.ricardo11