Fin de la era Castro en Cuba
El pasado domingo 11 de marzo se realizaron elecciones en Cuba, con base en la información emitida por la Comisión Nacional Electoral estuvieron convocados a votar 8 millones 926 mil 575 ciudadanos, de éstos, se presentaron a las urnas 7 millones 399 mil 891, lo que arroja una envidiable participación del orden del 82.90%, un abstencionismo del 18.10%. Los votos válidos representan el 94.42%, los nulos fueron el 1.26% y los votos en blanco el 4.32%.
El propósito de las elecciones fue constituir las asambleas provinciales, lo que ocurrió el pasado 25 de marzo, con estos órganos constituidos, el 18 de abril se conformó la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), órgano supremo del poder del Estado, en otras palabras, el Poder Legislativo de la República de Cuba, cuyos integrantes suman 605 diputados que integran la legislatura. Debemos recordar que el sistema de elección en Cuba es interrelacionado a nivel municipal, provincial y nacional.
Una vez que la ANPP se constituye como una nueva legislatura, elige de entre sus diputados a su presidente, al vicepresidente y al secretario. También le corresponde elegir, de entre sus integrantes, al Consejo de Estado integrado por un presidente, un primer vicepresidente, cinco vicepresidentes, un secretario y 23 miembros. El presidente del Consejo de Estado es el jefe de Estado y jefe de Gobierno, desde febrero de 2008 desempeñaba ese cargo Raúl Castro Ruz.
En la prensa internacional se preveía que Raúl Castro dejaría de ocupar el cargo de presidente del Consejo de Estado, y de entre los nombres de posibles sustitutos, el que más se destacaba era el de Miguel Díaz-Canel, vicepresidente primero, quien ocupaba la posición que Raúl Castro, en su momento, tuvo respecto de su hermano Fidel Castro.
Miguel Díaz-Canel tiene 57 años, es ingeniero electrónico, dirigió provincias consideradas estratégicas, es formador de múltiples cuadros del Partido Comunista de Cuba, ha desempeñado diversos cargos en la administración cubana, en 2009 fue designado como Ministro de Educación Superior, además se le reconoce como un hombre de “firmeza ideológica” a favor de la continuidad del régimen en Cuba.
Aunque existían otros actores en el entramado político con trato duro y perfil ortodoxo, pertenecientes a la generación histórica de la revolución cubana, héroes de la Revolución Cubana y veteranos de la misma, no hubo sorpresas, Cuba optó por lo que parece ser la continuidad del proyecto “raulista” con Díaz-Canel al frente, primer líder nacido tras el triunfo de la Revolución de 1959, deseamos que sea para el bien del querido y admirado pueblo cubano.
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