Turquía 2018
Turquía ocupa el extremo oriental de la península de los Balcanes en Europa y, en Asia, la de Anatolia, limita al norte con Bulgaria y el mar negro; al noroeste con Georgia y Armenia; al este con Irán; al sur con Irak, Siria y el Mediterráneo y, al oeste con el mar Egeo y Grecia. El idioma oficial es el turco, también se habla griego, armenio, árabe y kurdo; el 98% de la población es musulmana.
La Gran Asamblea Nacional de Turquía es de tipo unicameral con facultades legislativas, se integra por 600 miembros. Las elecciones legislativas se celebraron el 24 de junio de 2018, el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) obtuvo 295 escaños; el Partido Republicano del Pueblo (CHP) se hizo de 146 posiciones; el Partido Democrático de los Pueblos (HDP) consiguió 67 lugares; el Partido de Acción Nacionalista (MHP) logró 49 parlamentarios; y el Republicano del Pueblo (IYI) alcanzó 43 miembros. Se registró una participación del 86.2%.
Las elecciones presidenciales se celebraron en la misma fecha, Recep Tayyip Erdogan (AKP) obtuvo el 52.5% de la votación válida emitida; Muharrem Ince (CHP) logró el 30.67% de los votos; Salahattin Demirtas (HDP) alcanzó el 8.36% de la votación; y Meral Aksener (IYI) recabó el 7.33% de los sufragios. Con motivo de los cambios constitucionales de 2017, el presidente será jefe de Estado y jefe de Gobierno.
El partido de Erdogan (AKP) consiguió la mayoría absoluta en la Gran Asamblea Nacional, y tendrá el control de dicho órgano colegiado. Erdogan es presidente de Turquía desde 2014, y encabezará el gobierno por los próximos cinco años, destaca que con base en las recientes modificaciones constitucionales, podría repetir en el cargo por otros cinco años a partir de 2023 y hasta el 2028.
Erdogan, a quienes sus admiradores llaman el “reis” (jefe) y su círculo más cercano “beyefendi” (señor), antes se desempeñó como primer ministro (2003-2014) y alcalde de Estambul (1994-1998). Se trata de un hombre acostumbrado a detentar y ejercer el poder, es claro que con la modificación constitucional combinada con su resultado electoral, su mandato tendrá pocos límites, en este sentido, seguramente Unión Europea observará detenidamente el desempeño de Erdogan respecto de un país que, desde el golpe de Estado de 2016, vive en estado de emergencia, en el que miles de servidores públicos, soldados, académicos y maestros perdieron sus trabajos y otras tantas personas se encuentran privadas de su libertad, en espera de un juicio. Así las cosas en el territorio que alguna vez ocupara el poderoso imperio otomano, y una tierra que está entre Europa y Asia, en lo geográfico, en lo político y en lo ideológico.
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