Visión Democrática

Irán, república e islámica

La República Islámica de Irán, limita al norte con Armenia, Arzeibaján, el mar Caspio y Turkmenistán; al este con Afganistán y Pakistán; al oeste con Turkia e Irak; y al sur con el golfo Pérsico y el mar de Omán. Su población supera los 80 millones de habitantes. El idioma oficial es el farsi o persa, aunque también se hablan turco y kurdo; su moneda es el Rial iraní. El Islam es la religión oficial y está así consagrada en la Constitución, aunque conviven con una minoría cristiana y grupos reducidos que profesan el Zoroastrismo, entre otras profesiones de fe.

La forma del Estado de Irán encuentra su base en un Poder Ejecutivo cuyo titular es el Presidente de la República, quien gestiona la administración de ese país a través de diversos ministerios. El Poder Legislativo (Majlis) que se encarga de aprobar las leyes y votar a los candidatos a ministros que propone el titular del ejecutivo.

Ahora bien, paralelamente a este andamiaje institucional segla, existe un Líder Máximo, electo por la Asamblea de Expertos, a través de lo que se conoce como el principio: velayat-e faqih. Con base en dicho principio se coloca al estrato superior del clero chiíta y el Líder Máximo como los entes dominantes del poder político. El Líder Supremo es el Ayatollah Hodjatoleslam Sayyed Mohammad Ali Hoseyn Jamenei desde 1989.

Aunque la división de poderes está prevista en la Constitución de Irán, ésta se ejerce con la supervisión islámica del principio religioso ya referido. Entre las atribuciones del Líder Máximo se encuentra el definir las líneas más importantes de la política, el control de distintos órganos, la jefatura de las fuerzas armadas, además puede declarar la guerra.

Asimismo, existe un llamado Consejo de los Guardianes, quienes se encargan de asegurar que el sistema se cumpla, este cuerpo además actúa como Tribunal Constitucional y como un filtro para definir las candidaturas a las elecciones presidenciales y del parlamento.

El 19 de mayo de 2017 se realizaron elecciones presidenciales en Irán, con una participación de 73% de la ciudadanía, el ganador y actual presidente es Hasán Rohani, fue electo directamente por votación popular por un periodo de cuatro años, es titular del Ejecutivo desde el 2013, y de acuerdo con la Constitución de ese país no pude ser reelecto consecutivamente por más de una vez.

Desde el título de este texto se distinguen dos conceptos que en nuestra realidad parecen incompatibles: religión y forma democrática de gobierno, por ello es preciso recordar que nuestro modo laico de entender la separación Iglesia-Estado es resultado de nuestra historia, y no es la única manera de organizarnos que podríamos tener; para mí, como un convencido de su pertinencia, reflexionando sobre el tema sólo me resta pedir que dicha separación Iglesia-Estado Dios nos la cuide por muchos años,

@CP_IEEM_MX