/ domingo 31 de julio de 2022

Vox populi | Los mitos de la América Trumpista

Quizas sirva para ilustrar el ambiente de polarización y la falta de entendimiento; la figura de los dos burros atados con la misma cuerda, que en la necesidad de saciar su hambre terminan jalando al mismo tiempo para lados opuestos lo que no les permite comer a ninguno de los dos. La America profunda acusa a las elites urbanas de no entender lo que sucede, y a su vez los segmentos urbanos acusan de ignorancia al otro grupo. Cualquier parecido con la realidad mexicana es mera coincidencia.

La polarización política y social es un fenómeno cada vez más común, suele estar basado en narrativas sociales y conlleva riesgos en una época en que las democracias son cuestionadas. El ascenso-caída, y eventual regreso de Donald Trump esta basado en la llamada polarización, un fenómeno por el cual la opinión pública se divide en dos extremos opuestos, o a las facciones extremas de un partido político que ganan espacio o apoyo dentro del mismo.

Luego de la derrota en la elección presidencial de noviembre de 2020, Donald Trump convoco a sus seguidores a tomar el capitolio como una forma de protesta ante lo que el llamo una elección fraudulenta. Una parte de la opinión pública, mayormente constituida por republicanos cree vehemente que hubo fraude en la elección, y que debían defenderla a como diera lugar, incluso con violencia.

Paul Krugman, nobel de economía, advierte en su articulo “Los mitos de la America roja” publucado en New York Times de las distopías y distorsiones de la narrativa de la America roja, asentada mayormente en segmentos de baja escolaridad y de areas rurales de Estados Unidos. Dicha polarización podría agravar la democracia porque incita a la intolerancia, e incluso violencia política. Los mitos que alimentan la narrativa trumpista son:

1.- La gran mentira: La elección presidencial del 2020 fue robada, aunque en los hechos no hay evidencia de lo anterior, pues solo hay anécdotas alimentadas por la narrativa trumpista de que hubo fraude.

2.- Lo anterior descansa en una mentira aún mas grande: El reclamo que el partido demócrata (sus adversarios) está controlado por una ala radical de izquierda que se quiere apoderar de Estados Unidos. Es más probable que el partido democráta pueda ser identificado como un partido ubicado más al centro que a la izquierda, quizas como social democrata, pero no en el extremo.

3.- Candidatos republicanos acusan en elecciones primarias que los demócratas están socavando la nación, promoviendo violencia contra sus adversarios, incluso reclamando que producto de ello Estados Unidos esta ingresando a una guerra civil. Esta visión apocaliptica la estan compartiendo cada vez más norteamericanos de areas rurales, lo malo es que no tiene relación con lo que la otra mitad esta pensando y viviendo en los centros urbanos.

4.- El partido repúblicano poco a poco ha ido adoptando estas ideas radicales, y algunos creen en la gran mentira: El Presidente Biden y otros connotados demócratas pertenecen a un ala radical, incluso de creencias marxistas. Biden esta pasando por dias aciagos y una coyuntura de inflación histórica y recesión económica, y seguramente resentirá la ofensiva trumpista.

La polarización continuará porque somos sociedades desiguales y diversas, sin embargo la creciente intolerancia alimenta el sectarismo y limita el entendimiento de la “otra visión”, reduce el diálogo. Al final termina endureciendo las visiones más radicales, y conlleva riesgos de violencia e liegalidad que pueden trastocar aún mas a las débiles democracias.

Quizas sirva para ilustrar el ambiente de polarización y la falta de entendimiento; la figura de los dos burros atados con la misma cuerda, que en la necesidad de saciar su hambre terminan jalando al mismo tiempo para lados contrarios lo que no les permite comer a ninguno de los dos. La America profunda acusa a las elites urbanas de no entender lo que sucede, y a su vez los segmentos urbanos acusan de ignorancia al otro grupo. Cualquier parecido con la realidad mexicana es mera coincidencia.

Quizas sirva para ilustrar el ambiente de polarización y la falta de entendimiento; la figura de los dos burros atados con la misma cuerda, que en la necesidad de saciar su hambre terminan jalando al mismo tiempo para lados opuestos lo que no les permite comer a ninguno de los dos. La America profunda acusa a las elites urbanas de no entender lo que sucede, y a su vez los segmentos urbanos acusan de ignorancia al otro grupo. Cualquier parecido con la realidad mexicana es mera coincidencia.

La polarización política y social es un fenómeno cada vez más común, suele estar basado en narrativas sociales y conlleva riesgos en una época en que las democracias son cuestionadas. El ascenso-caída, y eventual regreso de Donald Trump esta basado en la llamada polarización, un fenómeno por el cual la opinión pública se divide en dos extremos opuestos, o a las facciones extremas de un partido político que ganan espacio o apoyo dentro del mismo.

Luego de la derrota en la elección presidencial de noviembre de 2020, Donald Trump convoco a sus seguidores a tomar el capitolio como una forma de protesta ante lo que el llamo una elección fraudulenta. Una parte de la opinión pública, mayormente constituida por republicanos cree vehemente que hubo fraude en la elección, y que debían defenderla a como diera lugar, incluso con violencia.

Paul Krugman, nobel de economía, advierte en su articulo “Los mitos de la America roja” publucado en New York Times de las distopías y distorsiones de la narrativa de la America roja, asentada mayormente en segmentos de baja escolaridad y de areas rurales de Estados Unidos. Dicha polarización podría agravar la democracia porque incita a la intolerancia, e incluso violencia política. Los mitos que alimentan la narrativa trumpista son:

1.- La gran mentira: La elección presidencial del 2020 fue robada, aunque en los hechos no hay evidencia de lo anterior, pues solo hay anécdotas alimentadas por la narrativa trumpista de que hubo fraude.

2.- Lo anterior descansa en una mentira aún mas grande: El reclamo que el partido demócrata (sus adversarios) está controlado por una ala radical de izquierda que se quiere apoderar de Estados Unidos. Es más probable que el partido democráta pueda ser identificado como un partido ubicado más al centro que a la izquierda, quizas como social democrata, pero no en el extremo.

3.- Candidatos republicanos acusan en elecciones primarias que los demócratas están socavando la nación, promoviendo violencia contra sus adversarios, incluso reclamando que producto de ello Estados Unidos esta ingresando a una guerra civil. Esta visión apocaliptica la estan compartiendo cada vez más norteamericanos de areas rurales, lo malo es que no tiene relación con lo que la otra mitad esta pensando y viviendo en los centros urbanos.

4.- El partido repúblicano poco a poco ha ido adoptando estas ideas radicales, y algunos creen en la gran mentira: El Presidente Biden y otros connotados demócratas pertenecen a un ala radical, incluso de creencias marxistas. Biden esta pasando por dias aciagos y una coyuntura de inflación histórica y recesión económica, y seguramente resentirá la ofensiva trumpista.

La polarización continuará porque somos sociedades desiguales y diversas, sin embargo la creciente intolerancia alimenta el sectarismo y limita el entendimiento de la “otra visión”, reduce el diálogo. Al final termina endureciendo las visiones más radicales, y conlleva riesgos de violencia e liegalidad que pueden trastocar aún mas a las débiles democracias.

Quizas sirva para ilustrar el ambiente de polarización y la falta de entendimiento; la figura de los dos burros atados con la misma cuerda, que en la necesidad de saciar su hambre terminan jalando al mismo tiempo para lados contrarios lo que no les permite comer a ninguno de los dos. La America profunda acusa a las elites urbanas de no entender lo que sucede, y a su vez los segmentos urbanos acusan de ignorancia al otro grupo. Cualquier parecido con la realidad mexicana es mera coincidencia.