La espera terminó, este fin de semana regresa el futbol amateur a San Cristóbal Huichochitlán con las semifinales del Torneo de Copa en la liga de veteranos, donde se enfrentarán en el campo El Pino Nuevo León ante Salamanca y Santos que se medirá al Necaxa.
Los equipos que avancen a la final jugarán el próximo 11 de octubre y después habrá otra pausa hasta que mejoren las condiciones sanitarias.
Para el público que acuda a apoyar a sus equipos se aplicarán los protocolos sanitarios para evitar contagios del Covid-19, desde el uso obligatorio de cubrebocas, gel y la sana distancia.
El primer compromiso se llevará a cabo este domingo cuatro de octubre al medio día y lo protagonizarán Nuevo León y Salamanca, se espera un duelo interesante ya que ambos conjuntos se presentarán con sus mejores elementos en el terreno de juego.
Sin embargo las mejores expectativas están con Nuevo León que después de 16 jornadas cerró en el primer lugar, mientras que Salamanca tuvo más dificultades, pero nada está definido, así que todo puede cambiar durante los 60 minutos de juego.
A las 13:30 horas, Santos, segundo clasificado de la tabla general recibirá a Necaxa, el encuentro se espera de mucha intensidad por lo que mostraron ambos conjuntos a lo largo del torneo, no obstante el largo receso por la pandemia del coronavirus ha mermado la condición física no así la técnica y estrategia.
Juan Jiménez, presidente de la liga, manifestó que era necesario retomar las actividades, pero lo harán con cautela porque los contagios por el Covid-19 continúan, es por eso que únicamente se realizarán las dos últimas jornadas y después una nueva pausa, lo más probable es que las competencias se retomen hasta el 2021.
“Pero es una realidad que en esta etapa todos los equipos le quieren pegar a Santos porque siempre ha estado en las fases finales,, así que este fin de semana tiene una nueva oportunidad de llevar el título a sus vitrinas”, dijo.
Al terminar el torneo espera mantener el mismo número de equipos, ya que algunos debido a la poca actividad quieren migrar a otras ligas, lo que implica una presión adicional en medio de la pandemia del Covid-19.