EL Diablo no encuentra la suya. La desesperación, falta de contundencia y los errores individuales volvieron a hacer presa al Toluca que vio caer su invicto como local ante Bravos de Juárez y sumó su quinta derrota en el torneo Guard1anes 2020.
En este partido estaba prohibido perder por todas las circunstancias que se suscitaron a principios de la semana y nuevamente una equivocación de marcación condicionó el resultado y desde muy temprano todo el desarrollo del partido.
No fue un arranque de partido sencillo para ninguno de los dos equipos , la cancha mojada propició que la circulación de la pelota en medio campo fuera rápida, pero poco efectiva frente a las porterías.
Apenas al minuto 12, Rubens Sambueza con su toque y visión de cancha se desprendió de la marca defensiva de Bravos, encaró y centró a media altura, sin embargo Alexis Canelo no llegó a la cita con el esférico simplemente para empujarla y el Toluca se perdió una jugada importante para abrir el marcador.
Esta fórmula comenzó a darle más posesión de la pelota al Diablo que intentó crecer en el encuentro. En una triangulacion a velocidad entre argentinos fue Sambueza el que ahora se perdió el primer gol. Por la banda Canelo condujo el esférico, sobre la marca cedió a Enrique Triverio que dejó muerto el pase a Rubens, pero el capitán pateó con la zurda muy desviado del marco de Enrique Palos.
Canelo tuvo dos opciones más de relativo peligro sin que pudiera concretarlas en la portería fronteriza donde Palos, que fue el sustituto de Iván Vázquez, comenzó a ser factor para mantener el marcador en ceros.
Tras estas acciones y con apenas 25 minutos de juego, Alexis Canelo tuvo que abandonar el encuentro acusando una lesión muscular y Michael Estrada entró al relevo en el ataque escarlata. En la primera bola que tocó el ecuatoriano terminó estrellandola en la humanidad del cancerbero de Juárez cuado se cantaba el primer tanto del Toluca.
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Bravos, que estuvo prácticamente inoperante al ataque, tuvo algunos esbozos de peligro sobretodo en los últimos minutos del primer tiempo que no aprovechó pese a la tibia marca de la defensa roja.
En tiempo agregado, Alan Medina volvió a dejar claro que está lejos de su mejor versión futbolística. El canterano que viene de una larga rehabilitación no pudo concretar ante la puerta del rival y se tuvo que conformar con mandar un zapatazo chorreando que murió sobre la línea final.
En el complemento con Marco Fabián como armador, Juárez rápidamente se puso arriba en el marcador con un tanto de Darío Lezcano. Desde la banda el atacante tomó la bola, recortó a Adrián Mora y fusiló a Luis García para el 0-1 que ensombreció el panorama para el Toluca.
El gol en contra sacó del guión a los choriceros, que hicieron circular el esférico siempre por los botines de Sambueza pero tampoco pudieron plantarse con peligro real en la portería del rival. Conforme avanzó el tiempo, el Toluca apostó por avanzar algunos metros impulsado más por la desesperación que por el orden.
Los dirigidos por Gabriel Caballero bajaron la cortina, reventaron todo lo que llegó a su marco y tras cinco minutos de agregado, el silbante central Oscar Mejía decretó la culminación del encuentro.
