Ocho de cada diez pacientes que llegan a alguna institución del sector salud con problemas infecciosos o necróticos en los pies tienen como única alternativa la amputación de la extremidad informó Rossana Llergo, vicepresidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).
De acuerdo con la especialista, la diabetes es una enfermedad crónica de larga evolución que afecta a diferentes órganos incluida la piel situación por la cual muchos pacientes corren el riesgo de desarrollar infecciones cutáneas especialmente las relacionadas con hongos debido a los altos niveles de glucosa.
Asimismo indicó que muchas de las enfermedades desarrolladas por el paciente radican en el mal funcionamiento de las células de defensa situación que reduce la capacidad del organismo para responder al ataque de hongos y bacterias.
Dentro de los problemas más comunes se encuentran la dermopatía diabética, caracterizada por manchas rojizas que con el tiempo oscurecen y forman costras en las rodillas, muslos y antebrazo, la bullosis diabeticorum que son ampollas que parecen en piel sana.
Al respecto Rossana Llergo aseguró que la neuropatia diabética es otra de las enfermedades aumenta los riesgos a desarrollar pie diabético debido a que se caracteriza por una infección, ulceración y destrucción de los tejidos profundos en las extremidades las cuales se traducen en la pérdida de la sensibilidad en los pies ocasionando que el afectado no sienta una cortadura, ampolla o llaga.
Detalló que el tratamiento del pie diabético va desde medicamentos que ayuden a la cicatrización hasta procesos quirúrgicos para restablecer la circulación y de esa forma salvar la mayor parte de la extremidad aunque dicho tratamiento debe ser riguroso.
Finalmente hizo un llamado a quienes viven con este mal para visitar regularmente al dermatólogo y tomar algunas medidas preventivas como revisar y lavar los pies todos los días, mantener humectada la piel y proteger los pies de cambios de temperatura.