El confinamiento por la presente contingencia puede provocar en muchas personas el “síndrome del ermitaño” e incluso rasgos de fobia hacía la la gente, señaló el especialista en psicoterapia, Jaime Ortiz, quien recomendó poco a poco volver a la realidad y salir del encierro para aprender a convivir con el virus.
El especialista en psicoterapia psico-análitica y psicoanálisis explicó que dicho síndrome puede aparecer en muchas personas que han seguido al pie de la letra la cuarentena ya sea por la enfermedad o por su seguridad e incluso indicó que siempre una situación que afecta en general a un país o al mundo entero trae consigo consecuencias mentales.
Es como cuando ocurre un sismo, a pesar de vivir con la amenaza, la mayoría de los mexicanos nos entra la solidaridad y salimos para ayudar a los demás. Estamos en contacto con todos.
Por otra parte, aseguró que por el contexto en el que se encuentra el país la reacción es diferente pues el salir representa un peligro y desconfianza que ha llegado ha generar actos de discriminación tal y como ocurrió con personal médico en distintas partes del país.
“Lo que se recomienda ya en estas alturas es salir de manera paulatina y comenzar a tener contacto con personas, es decir quizás hacer una caminata para que le ayude a adquirir una mayor confianza, pues para algunas personas seguramente será amenazante ir a un lugar donde exista gente”, recalcó.
Finalmente hizo un llamado para que la población esté bien informada sobre el tema de la pandemia y tratar de enfrentarse a esta nueva realidad desde el punto de vista mental, y si en algún momento presenta muchas dificultades para incorporarse a esta nueva realidad, recurrir a solicitar apoyo psicológico que algunas instituciones ofrecen de forma gratuita.
¿Qué es el síndrome del ermitaño?
Es un aislamiento del círculo social y hasta familiar que se hace evidente en las grandes metrópolis donde el ritmo vertiginoso donde el aislamiento social y la falta de comunicación son moneda corriente. En este caso se puede presentar por un confinamiento prolongado.