Según un reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) aproximadamente 1.8 billones de personas en el mundo sufren de presbicia o vista cansada, una evolución natural por envejecimiento que se puede convertir en inevitable después de los 40 años de edad.
La presbicia se caracteriza por una disminución de la capacidad de enfoque del ojo que causa una pérdida de nitidez para ver de cerca, no obstante se puede tratar como cualquier otro defecto de la vista y mejorar la calidad de vida.
Durante la juventud el cristalino es blando y flexible, eso permite que los pequeños músculos que están dentro del ojo llamados ciliares cambien fácilmente para ver objetos cercanos o lejanos, sin embargo después de los 40 años se pierde la elasticidad y capacidad de enfoque, detalla una infografía de la UNAM.
Es por eso que para quienes ya tienen esta edad y han notado que es necesario alejar el libro o el teléfono celular para una mejor lectura, es momento de acudir al especialista, si determina que lo único que se padece es la presbicia será necesario utilizar lentes de lectura.
Fue en el año de 1959 cuando Essilor revolucionó el mundo de la óptica con el nacimiento de la primera lente progresiva Varilux, inventada por uno de los fundadores del grupo: Bernard Maitenaz, con lo cual las personas mejoraron su calidad de vida.
La importancia de los lentes radica en que incluyen una graduación que varía progresivamente, por lo que corrige el problema de manera más eficaz y se adapta a todas las distancias, además de que evita estar cambiando de gafas.