Cualquier persona que haya sufrido de piedras en el riñón -mejor conocidas como cálculos renales- sabe lo incómodo y doloroso que puede llegar a ser este padecimiento. Sin embargo, una reciente investigación sugiere que el alivio podría ser simple y divertido: subirse a una montaña rusa.
De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of the American Osteopathic Association, estas atracciones mecánicas podrían ayudar a expulsar las piedras almacenadas en los riñones, especialmente aquellas no mayores a cinco milímetros y si el paciente viaja preferiblemente en el último vagón de la atracción.
El doctor David Wartinger, uno de los investigadores, explicó que algunos de sus pacientes le comentaron que después de subirse a las montañas rusas habían podido arrojar sus piedras en el riñón, lo que motivó la investigación.
Para realizar la investigación, los doctores David Wartinger y Mark Mitchell crearon un modelo de silicona en 3D de un riñón y le insertaron tres cálculos renales de diferente tamaño, para ponerlo a prueba en las atracciones de Disney World, en Orlando.
El resultado de dicho experimento arrojó que la montaña rusa es ideal para atacar este padecimiento sobretodo aquellas que cuenta con altas velocidades, giros, vueltas pero que no pongan de cabeza a los pasajeros ni realice movimientos invertidos.
No cualquier montaña rusa sirve
Como se dijo anteriormente no cualquiera de estas atracciones sirve pues, para ayudarnos con este padecimiento el juego mecánico debe ser una como la Big Thunder Mountain Railroad en Disneylandia. "No es de las más excitantes, obtiene apenas 3 de 5 puntos posibles en una escala de montañas rusas", explica el científico.
Lo verdaderamente importante es que suba y baje constantemente y se mueva mucho de izquierda a derecha. "Es como andar a tropezones", explicó Wartinger en una entrevista para la DW.
