El Sistema Único de Factibilidad (DUF) se encuentra lejos de ser un mecanismo facilitador de la inversión en el Estado de México, ya que por ejemplo, a estas alturas no se ha reunido la Comisión Estatal en la materia para sesionar de manera ordinaria tres veces al año o de forma extraordinaria las ocasiones que sean necesarias.
Así lo denunció, Jesús Espinoza García, especialista en asesoría y gestoría de Planificación Industrial, quien lamentó que hasta ahora la Comisión Estatal de Factibilidad registre ocho meses sin sesionar con los riesgos que ello puede traer consigo para lograr la instalación de nuevas empresas en la entidad.
“En la realidad todo lo que se prometió para la obtención del DUF no se esta cumpliendo; y aunado a ello, acaban de cambiar al director de Atención Empresarial, aspecto que frenará aún más la obtención de resultados”, aseveró.
Incongruencia exigir el DUF
El también maestro en Valuación Inmobiliaria, Industrial y de Bienes Nacionales, indicó que repentinamente personal de la Dirección Sanitaria llega a realizar visitas a restaurantes, no solamente para inspeccionar, sino que de paso les solicitan el DUF, ya que de lo contrario los amedrentan con cerrar o clausurarles el lugar.
Aunado a lo anterior, refirió que para proyectos de desarrollos industriales o simplemente para la ubicación, construcción y operación de una empresa, están surgiendo despachos o coyotes que se ofrecen sacar el Dictamen Único.
“Para realizar estos trámites los coyotes cobran una importante cantidad de dinero, con lo cual cada empresa o desarrollador se ve en la necesidad de contratar a uno o varios despachos para integrar las carpetas solicitadas”, señaló.
Cabe recordar que en la Gaceta de Gobierno del 7 de septiembre del 2016 se publicó el decreto número 120 de la LIX legislatura de la entidad, por el cual se reformaron y derogaron disposiciones estatales, con la finalidad de simplificar tramites y tiempos para hacer mas ágil el establecimiento de unidades económicas, así como fortalecer ya traer inversiones al estado, sin embargo, a estas alturas no se ha cumplido con dicho propósito.