Debido a que nuestro país todavía registra graves rezagos en diferentes rubros, como la investigación, la innovación y el desarrollo tecnológico, ya que ni siquiera se destina el uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), el sector privado local propuso la implementación de un incentivo fiscal que fomente la inversión en esta materia.
Cabe destacar que el referido incentivo contemplaría un monto máximo de 60 millonesde pesos por empresa a proyectos mínimos de 10 millones de pesos, y para el ex presidente de la Coparmex en el valle de Toluca, Edgar Cerecero López, debe tratarse de un rubro prioritario en el próximo sexenio federal.
Para el empresario se trata de un objetivo similar al de muchos países latinoamericanos, aunque de acuerdo con autoridades internacionales en la materia, no resulta suficiente para reducir la creciente brecha científica y tecnológica.
De igual forma, advirtió que los países que no tomen en serio a la investigación e innovación tecnológica en los próximos años estarán condenados a la dependencia y al subdesarrollo.
De acuerdo con el Índice de Competitividad del Foro Económico Mundial México subió posiciones en innovación, pero la realidad es que seguimos muy lejos de Brasil o Chile, y aún más de China y la India.
Asimismo, agregó que la debilidad de México en esta área se manifiesta tanto en las bases y recursos necesarios para tener un sistema de investigación, innovación y desarrollo tecnológico competitivo, como en la propia producción de innovación.
"En nuestro país, abundó, la disponibilidad de científicos e ingenieros es una de las más bajas del mundo en términos relativos, ya que apenas cinco de cada 10 mil personas en edad de trabajar están clasificadas como investigadores, 11 veces menos que en una nación como Francia y casi 14 veces menos que en Estados Unidos".