La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), ante el anuncio del cierre de las actividades no esenciales del 19 de diciembre al 10 de enero, indicó que se estima que a final de año puedan cerrar en todo el país 122 mil restaurantes y perderse 450 mil empleos.
En la Ciudad de México y su Zona Metropolitana, hasta noviembre, habían cerrado definitivamente 13 mil 500 establecimientos, agregó.
La Canirac calificó como lamentable este nuevo cierre de actividades y aseguró que causa mayor afectación a la industria restaurantera, limitándolos a realizar únicamente entregas a domicilio o para llevar, señaló que esta determinación condena a miles de trabajadores al desempleo y a los establecimientos al cierre total, lo que provocará una crisis irreversible, impactando la economía de miles de familias.
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Señala que la medida fue realizada sin un previo aviso que permitiera a los restaurantes mover o terminar su inventario, lo que provocará pérdidas millonarias ya que el sistema de entregas (delivery) no es suficiente para canalizar sus productos, como son los perecederos.
Los representantes de CANIRAC indicaron que la industria entiende la necesidad de bajar los contagios y hospitalizaciones, por ello, desde que inició la crisis de salud el sector restaurantero ha sido parte de la solución, implementando estrictas medidas de higiene, por lo que los establecimientos formales son seguros.
Mencionaron que, de acuerdo a las autoridades, son las reuniones y fiestas privadas las fuentes de contagio y que este nuevo cierre alienta el incremento de los eventos privados y la venta informal de comida en la calle.
La Canirac, tras realizar una encuesta entre empresarios restauranteros, dio a conocer que, sin apoyos, casi ocho de cada 10 restaurantes podrían quebrar en las siguientes semanas, debido a la crisis provocada por la pandemia.
"La industria, a pesar de manifestar su compromiso con el país, está sobreviviendo por su propia cuenta, donde los más afectados son los trabajadores y los proveedores locales que forman parte de la cadena productiva"; dijeron los empresarios.
La Canirac hizo un llamado a las autoridades para llevar a cabo una declaratoria sanitaria conforme a la ley, para tener un marco jurídico que permita llegar a acuerdos con arrendadores, proveedores y empleados, dar apoyos fiscales como prórroga de pagos de impuestos, servicios, derechos, licencias de funcionamiento y subsidios al empleo y finalmente, que el gobierno garantice el cumplimiento del semáforo rojo para que las actividades productivas puedan reactivarse el 11 de enero.
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