En el marco de las fuestas patrias las quemaduras por pirotecnia se elevan hasta un 40%, advirtió el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Poniente, por lo que recomendó a las población extremar precauciones y evitar el uso y manipulación de materiales pirotécnicos.
De acuerdo con la pediatra adscrita al Hospital General Regional (HGR) número 220 en Toluca, Inés Álvarez de la Rosa, las quemaduras por pirotecnia ocasionan importantes secuelas a corto, mediano y largo plazo, siendo los menores de entre 3 y 5 años el sector de la población más afectado.
Precisó que la mayoría de las quemaduras que se presentan es por el contacto directo con estos materiales, explosiones con ondas expansivas que no sólo ocasionan lesiones en la piel sino también en músculos y tendones de las extremidades, cara y área inguinal.
Entre las secuelas a corto plazo destacan el dolor o enrojecimiento; a mediano, depende de la zona afectada, si es en la cara, pueden presentar afectaciones en los ojos con secuelas permanentes, así como disminución en la audición, condiciones que intervienen en su desarrollo cognitivo y social.
Por lo anterior, la especialista en salud recomendó a la población que en caso de acudir a un espectáculo de juegos pirotécnicos, mantener una distancia de al menos 15 metros, no estar cerca de lugares donde se encuentren almacenados o apilados este tipo de materiales, además de evitar el uso de encendedor, cerillos o fumar.
Cuando de manera desafortunada se presenta una quemadura, es importante destacar que no se deben aplicar ningún remedio casero como aceites o cremas, ya que éstas, en lugar de aminorar el daño puede provocar un proceso infeccioso y complicar la lesión. Reiteró que el uso de hielo está contraindicado, ya que puede ocasionar una quemadura más severa y agravar la herida.
Álvarez de la Rosa explicó que lo único que debe hacerse es lavar con abundante agua a temperatura ambiente, si es posible retirar la prenda y si es de tipo sintética y se adhiere a la piel, no tratar de remover.
En caso de que la piel presente un tono amarillo o blanco, es decir, una quemadura de segundo grado debe colocarse una gasa o un material estéril para cubrir en tanto se acude a un servicio de urgencias.