El presidente municipal de Toluca, Raymundo Martínez Carbajal reiteró que, pese a la deuda acumulada de gestiones anteriores, su gobierno no contempla solicitar algún crédito para allegarse de recursos.
En ese sentido, refirió que la administración a su cargo suma un adeudo de más de mil 650 millones de pesos.
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Vale mencionar que, tras la aprobación del paquete fiscal 2022, se abre la posibilidad de la petición de algún financiamiento; sin embargo, al momento el alcalde de la capital mexiquense aclaró que no lo ha previsto.
Aunado a esto, detalló que la anterior gestión les heredó una deuda de más de mil 400 millones de pesos mientras que el resto del adeudo lo conforman las cantidades de cuatro trienios pasados.
Recalcó que en el quinto mes de su administración se ha empezado a saldar pagos con proveedores la cual era una demanda sentida por lo que se ha fijado como meta terminar la obra pública que no se concluyó en gestiones pasadas.
Porque la ley lo mandata no porque a mi guste ni porque yo no quiera hacer obras estamos hablando de al menos 106 obras.
Asimismo, dijo se han intervenido al menos 12 porque el resto tiene alguna observación y esperan ser liberadas. En ese sentido, expresó que el periodo gubernamental 2022-2024 ha apostado por diversas estrategias enfocadas a la recaudación de recursos. “Esperamos darles buenas noticias de toda la estrategia, de las 19 estrategias para recaudar”.
Subrayó que Toluca es un municipio con mucha riqueza económica, industrial, cultural y artesanal que pueden ser ejes importantes para las finanzas locales.
“Debemos ponernos las pilas, ponernos a trabajar, recaudar bien, trabajar en coordinación y armonía y orden”.
Recordó que los gobiernos municipales han sido objeto de recortes en recursos. No obstante, la mayoría de estos en los últimos 15 años han incrementado su población tal y como sucede con la capital mexiquense.
Vale recordar que a finales del año pasado trabajadores sindicalizados y varios servicios realizaron diversas manifestaciones las cuales fueron desde plantones hasta cierre de calles, así como arrojar basura en diversas avenidas y en Palacio de Gobierno estatal ante la falta de pagos quincenales y prestaciones laborales.