Más que falta de liquidez, especialistas en Economía consideraron que los empresarios del transporte en el Estado de México no han tenido voluntad para otorgar subsidios a estudiantes y grupos vulnerables.
Dante León Ortega, profesor-investigador de la Facultad de Economía de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), aseguró que no es válido el hecho de que los transportistas sigan argumentando que enfrentan problemas de solvencia financiera, cuando ni siquiera se ha incrementado el precio del combustible.
“Tendremos que hacer un poco de historia, porque en la época de los 70´s, sobre todo, los estudiantes eran un sector muy subsidiado para el servicio público del país, como sigue ocurriendo en otras entidades de la República, pero ahora lo que vemos por parte de los empresarios es resistencia a los cambios políticos”, apuntó.
Cabe recordar que hace unos días, la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), delegación Estado de México, descartó por ahora proporcionar descuentos a sus usuarios en el valle de Toluca, debido a que se encuentran enfrentando otros retos, como la capacitación a sus operadores y la descapitalización.
Necesario que puedan hacer un sacrificio
El especialista en Economía, consideró necesario que los empresarios del ramo “puedan hacer un sacrificio”, y otorguen subsidios a los sectores que los requieren.
“No veo un gran obstáculo para que se pueda hacer excepciones con los descuentos, porque además dicha medida realmente no tendría que ser tan fuerte”, sostuvo.
De esta forma, afirmó que los estudiantes con un descuento hasta de dos pesos estarían más que satisfechos.
Falta voluntad de los empresarios
El profesor de la máxima casa de estudios de la entidad, señaló que a los transportistas les hace falta voluntad, porque los combustibles no han presentado mayores ajustes.
Por lo anterior, indicó que en el caso del transporte local, los empresarios no cuentan con argumentos válidos para haber registrado un incremento en su servicio.
Duro golpe a la economía familiar
Por su parte, Juan Gabino González Becerril, profesor del Centro de Investigación y Estudios Avanzados de la Población (CIEAP) y economista de la máxima casa de estudios de la entidad, lamentó que el ajuste al precio del pasaje esté presentando un importante impacto en el presupuesto familiar.
“Un padre de familia con tres hijos estudiando paga por cada uno 12 pesos o más solamente en un viaje. A ello, tendremos que sumar el hecho de que los padres también se trasladan por esta vía, por lo que estamos hablando de un fuerte impacto a la economía de las personas”, expresó.
Consideró lamentable que el transporte en la entidad opere sin un control, y la política gubernamental se haya dejado a la libre oferta y demanda, motivo por el cual, el gobierno no tiene la capacidad para poder decidir sobre el ajuste.
El especialista comentó que los diputados locales hablan de una mesa de análisis, pero para cuando ésta termine, la población ya dará por hecho que tiene que pagar los 12 pesos.
“Además una mesa de negociación no puede ser únicamente entre autoridades, transportistas y legisladores, sino que debe incluir a representantes de la sociedad civil”, externó.
Ajuste que no se justifica
El especialista en Economía dijo que se trata de un ajuste que no se justifica, debido a que no ha habido aumentos en los principales insumos de los transportistas, como el diésel y la gasolina.
“Los empresarios se adelantaron al incremento de los precios, y el gobernador no ha salido a decir nada, aunque la sociedad civil sí ha protestado contra el tarifazo”, aseveró.
Lamentó que los empresarios del transporte no cambien, y que el gobierno destine recursos hacia donde no es necesario, dejando a la población en indefensión.
“Hay falta de voluntad política por parte de los legisladores, el gobierno estatal y los empresarios para que puedan aplicar subsidios a este servicio. La gente apostó por un cambio que no hemos visto, y seguimos en lo mismo”, finalizó.
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