Toluca, México.- Para que el Mexibús sea una alternativa de ordenamiento del transporte público en Toluca, el pasaje debe subir por el lado del conductor, de lo contrario sería un autobús más, aseguró la catedrática y urbanista, Susana Bianconi, quien señaló la necesidad de implementar las paradas donde las posibilidades de seguridad para el peatón son mínimas.
Advirtió que la entrada en operación del tren interurbano y la necesidad de tener rutas para alimentarlo sólo prevén más complicaciones en el tránsito a ras de suelo, lo que no sucedería si lo hubieran hecho subterráneo, como un Metro.
Ante ello se deberían trabajar al mismo tiempo el Mexibús y la bicicleta como las dos opciones de transporte para aliviar el congestionamiento vehicular que se tiene con el actual modelo de transporte público y privado.
Indicó que la ciudad no cuenta con vialidades aptas para este tipo de transporte y ejemplificó la avenida Las Torres, "donde al no existir camellón la gente caería al pozo", es decir al carril deprimido, además la capital mexiquense sólo cuenta con vialidades que la atraviesan de poniente a oriente, pero no de norte a sur.
Sin embargo, agregó, nos dejan el Mexibús como única alternativa al haber construido el tren interurbano México-Toluca por encima de la tierra y no de manera subterránea, como un Metro, quitaron la posibilidad de haber conexiones de manera subterránea también, lo cual va a seguir complicando el tráfico a ras de suelo.
“Ojalá a ras de sueño todo fuera para el peatón y los transportes anduvieran subterráneos, pero este modelito chino que nos metieron es alto y congestiona todo a nivel de suelo”, aseguró Susana Bianconi.
Explicó que vialidades como Morelos sí podrían contar con Mexibús, pues se tendría un sólo carril confinado y no cuatro invadidos por autobuses, lo mismo que Venustiano Carranza, aunque allí habría que planearlo cuidadosamente para no sacrificar camellones.
Resaltó que este es el costo de tener una urbanización muy extensa y poco concentrada, como lo demuestran las estadísticas de los últimos 30 años que dicen que Toluca duplicó el número de gente, pero multiplicó por 10 la mancha urbana, lo cual hace muy difícil resolver el tema de distancia caminable, pues se ha favorecido la dispersión y con ello la necesidad de mayor utilización del vehículo.