El colectivo Bicionarias promueve la movilidad sustentable a través de diferentes actividades, sin embargo la pandemia ha frenado gran parte de sus rodadas y la bici-escuela los fines de semana, situación que lo ha llevado a buscar otras opciones para apoyar a la sociedad, especialmente a las mujeres.
Con “Sana Sana, la bici me salva”, el colectivo con más de ocho años de existencia en el Valle de Toluca creó este programa de acompañamiento sobre ruedas hecha por mujeres para mujeres, el cual surge para aminorar los efectos negativos que tiene el confinamiento en el pisque de las féminas.
“Hacemos bajo cuatro paredes actividades domésticas, educativas, profesionales y esto representa una gran carga tanto física como mental para nosotras”, comentó Patricia Luna Delgado, iniciadora del colectivo.
En la dinámica, las participantes se vinculan con mujeres vía redes sociales para salir a caminar o andaren bici, esto para demostrar que no sólo es un medio de transporte, sino como una forma de esparcimiento y despejarse de todas las presiones a las cuales se ven envueltas diariamente desde que el virus se volvió parte de nuestra realidad.
La iniciativa ha comenzado a ganar adeptas, ya que tras dos semanas de ponerse en marcha, cuentan ya con 60 participantes, asegurando que el ejercicio tiene efectos positivos, pues al realizarse estas actividades, el cuerpo humano genera endorfinas y ha ayudado en algunos casos a contrarrestar síntomas de depresión o ansiedad.
Toluca, Metepec, Zinacantepec y Lerma, son los municipios en los cuales el programa se ha extendido y para apoyar en el encierro, las participantes toman medidas de prevención en cada salida, desde la sana distancia y el uso de caretas o cubrebocas.
Con esta modalidad, también han comenzado a perseguir otro de sus objetivos, que la mujer comience a usar la bicicleta, buscando aminorar esa brecha urbana que existe en los ciclistas, pues las cifras revelan que por cada 10 hombres que hacen uso del transporte de dos ruedas, sólo una mujer entra en esta dinámica, las principales causas: falta de infraestructura, inseguridad vial y específicamente, el acoso sexual.