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La pandemia del Covid-19 devastó a los comerciantes de artículos religiosos del Santuario de Chalma, quienes diariamente luchan por sobrevivir y mitigar los efectos de la contingencia sanitaria a través de las pocas ventas que realizan ya que el templo religioso continúa cerrado y por ende las visitas de peregrinos no son tan abundantes como en años pasados.
De acuerdo con comerciantes de artículos religiosos y dulces tradicionales, las autoridades locales no les habían autorizado la apertura de sus negocios desde que comenzó la pandemia; sin embargo, hace dos semanas decidieron retomar sus actividades mercantiles ya que su economía no resistirá más.
Como resultado de esto casi el 50% de negocios permanecen cerrados lo que da un aspecto de abandono en las calles que dirigen al templo religioso.
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“Hemos estado cerrados porque no están permitidas las peregrinaciones y como verán, muchos no han abierto por lo mismo de que no viene mucha gente. Dicen que ya lo van a abrir en dos semanas (el templo) pero todo va a estar muy controlado para asegurar que se respete la sana distancia”, afirmó Guadalupe, comerciante de artesanías y artículos religiosos.
Añadió que para dar mayor seguridad a los visitantes, todos los negocios proporcionan gel antibacterial y sus encargados portan cubrebocas.
Hace un año no nos imaginamos que estaríamos metidos en esta situación pero con la gracias del señor lograremos salir delante de esto.
Sin perder la fe
El hecho de que el Templo del Señor de Chalma esté cerrado no es impedimento para que visitantes de diversos puntos del Estado de México acudan a dar gracias por los favores recibidos, como pago de una manda o a pedir un milagro.
Aquéllos que visitan el sitio por primera vez, en su mayoría, adornan sus cabezas con coronas de coloridas flores y algunos hasta las dejan colgadas en las rejas de la entrada principal como muestra de agradecimiento.
En el lugar también se pueden apreciar decenas de veladoras que los visitantes dejan prendidas frente a la imagen del Señor de Chalma, el cual luce en lo alto del templo religioso.
