La Universidad Autónoma del Estado de México debe más de 3 mil 200 millones de pesos al ISSEMyM porque cerca de 1, 400 millones corresponden a accesorios fiscales, es decir: recargos y multas por no haber pagado a tiempo, aseguró el diputado Max Correa de Morena.
Entre la Universidad Autónoma del Estado de México y los Cuerpos de seguridad Auxiliar (CUSAEM) concentran el 60% de la deuda al ISSEMYM, advirtió a su vez el presidente de la Comisión de Vigilancia del Órgano Superior de Fiscalización del estado de México (OSFEM), Tanech Sánchez.
Después de la reunión privada con la directora de ese instituto, Bertha Alicia Casado Medina el legislador de Morena señaló que le pidieron que quienes no han pagado las cuotas que se descuentan a los trabajadores sean sancionados para que se siente un precedente.
El diputado Max Correa refirió que la directora del ISSEMyM le señaló que al instituto la UAEM le adeuda 3 mil 200 millones de pesos, de los cuales, cerca de 1, 400 millones corresponden a accesorios fiscales recargos, multas; mientras los municipios y sus órganos deben cerca de 800 millones de los cuales ya han reportado 650 millones en convenios y 155 millones de pesos están en concepto de transitorios.
La funcionaria pública informó que trabajan en un convenio con la universidad y a pregunta de los legisladores sobre qué delitos podrían cometer quienes retienen las cuotas, les respondió que podrían incurrir en responsabilidades de carácter penal y anunció que ya realizan acciones para determinar créditos fiscales y plantear opciones de cobro.
Entre los caminos que tienen, explicó, Max Correa, está que la Dirección de Recaudación les descuente de manera directa a su presupuesto, y lo más extremo sería congelar las cuentas y quitar sellos digitales, pero de acuerdo con la titular del ISSEMyM no lo hacen con la UAEM porque pondría en riesgo la operación de la universidad.
Los diputados, refirió, advirtieron la necesidad de aplicar más mano dura porque si no, podrían incurrir en una responsabilidad y advirtieron que se pone en riesgo la funcionalidad de la máxima casa de estudios y del propio ISSEMyM.
“Lo que quedó en evidencia es que el rector y otros rectores han puesto en riesgo la viabilidad y el funcionamiento de la universidad (al no pagar) y están violando la ley al no enterar las cuotas al ISSEMyM”, sostuvo.
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