Más de 10 mil unidades de transporte público del Estado de México ya se encuentran conectadas al C5 de la Secretaría de Seguridad del Estado de México, como parte de la estrategia para inhibir delitos a bordo de los autobuses.
Raymundo Martínez Carbajal, titular de la Secretaría de Movilidad, informó que las unidades se distribuyen en al menos 500 rutas de todo el estado, sobretodo en las zonas consideradas de mayor peligro para los usuarios.
Estamos hablando de más de diez mil unidades en esta lógica, poco a poco vamos, la verdad es que también tienen que ver con las capacidades nuestras en materia tecnológica para recibir toda la información.
Al respecto, agregó que de las 500 rutas que están coordinadas con el C5 están involucradas alrededor de 300 empresas pertenecientes al valle de México y el valle de Toluca, mismas que cuentan con un kit de seguridad el cual consta de cámaras de videovigilancia, botones de pánico y gps.
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Asimismo, mencionó que se requiere capacitar a los operadores con un protocolo de actuación relacionado con el momento en que debe hacerse uso de los botones de pánico pues son situaciones especiales que ocurren en breve tiempo y bajo circunstancias de riesgo.
Cuando se aplica el protocolo del botón de pánico la respuesta es casi inmediata. El único problema es que trae circunstancias especiales como que el operador se pone muy nervioso.
Con la publicación de la Gaceta de gobierno del 20 de marzo del año pasado, hasta el primer semestre de este año, los transportistas tenían de plazo para actualizar las concesiones vencidas.
En el Estado de México existe un parque vehicular de transporte público superior a las 160 mil unidades, tanto de servicio colectivo, como el individual por lo que dicho servicio cubre unas 6 mil rutas en toda la entidad mexiquense y presta servicio para unos 11 millones de pasajeros, según datos de la Secretaría de Movilidad.
