Los créditos que antes de la crisis sanitaria del Covid-19 sostenían los taxistas en el valle de Toluca, actualmente se han vuelto difícil de pagar, por la baja afluencia de usuarios, advirtió Osvaldo Martínez, presidente de Autotransportes Unidos del Estado de México (ATUEM).
El líder taxistas mencionó que tan solo en dicha agrupación hay alrededor de 40 operadores que deben cubrir mensualidades con financieras, por la renovación de unidades que obliga la Secretaría de Movilidad.
"Son unos cuarenta compañeros que están en esa situación y deben pagar sin falta cada mes, algunos son propietarios y otros solo rentan la concesión", comentó Martínez.
Dijo que una mensualidad para un taxi a gas es de nueve mil pesos en promedio, con un descuento del 50%.
Mientras que en taxis ordinarios de modelo 2019 y 2020, es de seis mil pesos, es decir, son créditos más altos a los del crédito de un vehículo particular.
"Cada compañero se arregla con las financieras, y ayudamos en lo que podemos pero todos operadores están en la misma situación, con bajas entradas económicas", agregó.
Hasta el momento en ATUEM, organización adherida a la Canapat, no se han reportado casos de pérdidas de unidad por falta de pagos, precisó Osvaldo Martínez.
Sin embargo, las entradas económicas para las organizaciones de taxistas ha ido a la baja, pese a que el Gobierno del estado los sumó al programa emergente de Consume Local.
Martínez explicó que con dicho programa se pretende que los establecimientos comerciales adheridos usen los servicios de taxis mediante la plataforma a la que deben inscribirse, para dar atención a domicilios.
"No hemos tenido viajes con ese programa, si está bien, pero no hemos visto resultados", señaló el líder taxista.
Asimismo, las agrupaciones de taxistas no fueron considerados para el diseño de rutas especiales para dar servicios a trabajadores de la zona industrial durante la cuarentena.