Vecinos de San Mateo Atenco denunciaron la supuesta apertura clandestina de un bar ubicado sobre la vialidad de baja velocidad del Paseo Tollocan con dirección a la Ciudad de México, casi esquina con Emiliano Zapata, en la colonia Álvaro Obregón.
Lo anterior pese a la prohibición de apertura de bares, centros nocturnos, cantinas, salones de baile y centros de espectáculos debido a la suspensión de actividades no esenciales en la entidad mexiquense por la pandemia de Covid-19.
De acuerdo con la información proporcionada a El Sol de Toluca por los denunciantes, a través de entrevistas telefónicas, se trata de un sitio exclusivo para hombres que, además de permanecer en funcionamiento durante toda la noche, molesta por el elevado volumen de la música reproducida y los gritos de personas en aparente estado de ebriedad.
"Está abierto toda la noche, desde como a las 9:00 de la noche a las 6:00 de la mañana, pero hay ocasiones que se siguen hasta las 9:00 de la mañana y no dejan dormir, lo peor de todo es que somos vecinos que tenemos pacientes con Covid y no podemos descansar", explicó una de las denunciantes que solicitó el anonimato.
Debido a lo anterior, mencionó que han recurrido a tapones auditivos para mitigar el fuerte volumen de la música que se reproduce en el sitio, pero ésto, además de ser incómodo, no elimina el problema.
En reiteradas ocasiones, dijo, se ha dado parte a las autoridades por medio del número 911 y el número de denuncia anónima 089, así como por correos electrónicos, sin embargo, no se ha tenido una respuesta hasta el momento.
Pese a ello, reconocieron no haber denunciado los hechos ante la autoridad municipal.
Prolifera apertura clandestina de bares
La pandemia del Covid-19 no ha frenado la apertura de bares y centros nocturnos de entretenimiento, pues el 27 de octubre la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) clausuró dos bares en el municipio de Nezahualcóyotl. En el lugar fueron rescatadas 18 personas, presuntas víctimas de trata.
Un caso similar ocurrió en octubre en los municipios de Chalco, Tultitlán, Tlalnepantla y La Paz, en donde fueron clausurados cuatro bares en donde al parecer, también se cometía el delito de trata de personas. En los diversos lugares también fueron rescatadas más de diez mujeres probables víctimas de trata.
A la lista se suma la clausura de dos bares situados en los municipios de Toluca y Zinacantepec, en donde fueron rescatadas 19 mujeres.
En noviembre del año pasado también fue cateado un bar en el municipio de San Mateo Atenco, en donde se localizaron a ocho personas probables víctimas de trata.
En ese mismo mes, la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de México (Coprisem) clausuró otro establecimiento ubicado en Toluca, en donde presuntamente se ofrecía sexo en vivo y "orgyfiestas".
En días pasados la Coprisem informó sobre la clausura de un bar en Toluca, debido a su apertura pese a la suspensión de actividades no esenciales debido a la fase roja en el semáforo epidemiológico.
Hasta el 6 de noviembre del año pasado sumaban 54 suspensiones de establecimientos de venta de bebidas alcohólicas para el consumo inmediato o al copeo, sobre todo restaurantes-bar, cervecerías, bares y establecimientos conocidos como “giros rojos”, desde el inicio de la pandemia del Covid-19.
Marco jurídico
En la Gaceta de Gobierno del 2 de abril pasado se decretó el cierre de los negocios no esenciales en la entidad como medida de prevención para la mitigación del Covid-19.
“PRIMERO. Se ordena la suspensión temporal y de manera inmediata de todas las actividades no esenciales, con la finalidad de mitigar la dispersión y transmisión del virus SARS-CoV2 en la comunidad, para disminuir la carga de enfermedad, sus complicaciones y la muerte por Covid-19 en la población residente en el territorio del Estado de México”, dice el documento.
Además, se menciona que entre las actividades no esenciales destacan el funcionamiento de bares, cantinas, salones de baile, discotecas y video bares, centros nocturnos, centros botaneros y cerveceros, salas de sorteos de números, centros de apuestas remotas (casinos), billares y cualquier establecimiento para venta de bebidas alcohólicas para su consumo inmediato y/o al copeo, cines, gimnasios, zoológicos, balnearios, albercas públicas, boliches y baños públicos.
Una vez que se detecta un negocio que incumple con el cierre establecido por ser considerado como un giro no esencial, las autoridades solicitan al propietario su cierre voluntario, pero si se trata de un reincidente, podría hacerse acreedor a la clausura del local.
Cabe mencionar que la Coprisem establece multas a negocios que incumplan con este decreto, las cuales pueden llegar hasta los 868 mil 800 pesos.